Cangas de Onís,
J. M. CARBAJAL
Objetivo cumplido. El cangués Damián Mori Cuesta, al que sus convecinos conocen simplemente por «Dani», hermano del que fuera jugador profesional Pirri Mori, selló en la tarde del pasado jueves la clasificación matemática del plantel que dirige en la actual temporada, la Peña Deportiva Santa Eulalia, para los «play-off» de ascenso a la Segunda División B del fútbol español.
Dani Mori, que llegó al conjunto ibicenco procedente del menorquín Atlétic Ciudadela, está a punto de cumplir su primera temporada al frente de la Peña Deportiva, todo un histórico de las Islas Baleares, ya que militó, en el pasado curso 1993-94, en la Segunda División B, además de ganar el Campeonato balear de Tercera División en dos ocasiones.
La apretada victoria de la Peña Deportiva, por dos goles a uno, en su propio feudo, ante el colista del grupo decimoprimero de la Tercera División, el Atlético Villacarlos, así como la derrota del Constancia -quinto clasificado y rival directo de los de Mori- en su visita al Ferriolense (2-1), propició matemáticamente la clasificación del equipo ibicenco para los «play-off». Ahora mismo, tras esa jornada liguera, los de Dani Mori ocupan la tercera plaza en la clasificación, con 73 puntos, cuando restan tan sólo tres partidos para la finalización de la fase regular del campeonato liguero.
En la aventura por tierras ibicencas no estaba sólo Dani Mori, ya que en su plantilla también se encuentra otro viejo conocido de la afición futbolista del Oriente, el cancerbero Carlos Moro, quien arribó a la isla pitiusa esta misma temporada, tras defender en varias campañas la portería del Ribadesella CF, y con anterioridad, la del Cánicas AC.
