Merodio (Peñamellera Baja), R. AJA

El Ayuntamiento de Peñamellera Baja seguirá adelante con la declaración de parcelas sobrantes de un camino y un trozo de terreno ajardinado (con dimensiones de 52,35 y 30,49 metros cuadrados) en Merodio para modificar su calificación jurídica y tramitar el expediente para su enajenación.

La decisión municipal pretende dotar de «seguridad jurídica» al terreno para que «no sea argumento de controversia cada vez que hay un enfrentamiento entre vecinos por cuestiones privadas». Esto es parte del contenido de la notificación de acuerdo plenario remitida a la familia Acebo Sierra, que ha atajado las acusaciones de apropiación de terreno público vertidas por algunos vecinos de Merodio. Rosario Acebo cree suficientemente probado y documentado que su familia «nunca» se apropió del terreno (un callejón entre la parte trasera de la vivienda y el muro del parque público y un trozo de terreno ajardinado), sino que fue «permutado» a sus padres «en concejo», en compensación por permitir que la red de alcantarillado de Merodio que llevaba el saneamiento a esa localidad en el año 1977 transcurriera por una parcela de un familiar, acuerdo que el propio Ayuntamiento ha refrendado a tenor de los testimonios que constan en el expediente del entonces alcalde de Merodio, Manuel Ruiz Rodríguez, y del regidor municipal, Ángel González Fernández. Además, Acebo recalca que ambas parcelas tienen el mismo registro catastral que la vivienda y que en 1996 el Consistorio autorizó el cerramiento del jardín con una balaustrada. Acebo interpreta que el litigio suscitado en torno a este pedazo de terreno es fruto de la «inquina» de «sólo una familia de Merodio» hacia la suya, rebajando, así, la representatividad vecinal que los denunciantes quieren transmitir.