Panes (Peñamellera Baja),

Rebeca AJA

La ermita de San Juan de Ciliergo, a las afueras de Panes, en el concejo de Peñamellera Baja, estuvo abierta al culto hasta 1936, año en el que un incendió arrasó el templo, dejándolo en un ruinoso y perenne estado de abandono al que ahora el Ayuntamiento de Peñamellera Baja quiere poner freno. La última actuación sobre las ruinas de esta iglesia, incluida en el Inventario de Patrimonio Arquitectónico de Asturias, se remonta al año 1989, cuando se reparó la cubierta del ábside. Sin embargo, la intervención municipal proyectada pretende devolver a la ermita el aspecto que tenía antes de ser incendiada durante la Guerra Civil.

Por eso, además de obras de limpieza, drenaje y consolidación de muros, se planean «obras de mayor importancia» sobre la nave central dado el estado actual de la edificación, quince años después de la última intervención. Así, el proyecto visado por la arquitecta municipal y listo para su tramitación administrativa plantea, además de una nueva reparación de la cubierta del ábside ejecutada en 1989, cubrir la nave central manteniendo las características de esa intervención anterior en la cabecera de la iglesia.

La intención es proteger y conservar «a largo plazo» la ermita, frenando la entrada de agua y el crecimiento de la vegetación en el interior. Para la cubrición se plantea una estructura con correas y dos cerchas de madera de castaño separada de la fábrica de piedra actual. Inicialmente se había pensado realizar una cubierta a dos aguas similar al primitivo estado de la iglesia, dejando el atrio y la sacristía, hoy totalmente derruído, sin cubrir.

Aunque en el proyecto no se especifica el uso y contenido que se quiere dar a la ermita, el consistorio aboga por un fin cultural de manera que su interior, llegado el momento, pueda adecuarse para albergar una sala de exposiciones o una biblioteca. Este antiguo templo de origen románico se encuentra a unos 500 metros de Panes, linda con el paseo fluvial que recorre la vega de La Brañona y con la carretera N-621 justo a la altura del recien concluido aparcamiento de La Tejera.

Por otro lado, el Ayuntamiento de Peñamellera Baja, siguiendo recomendaciones de la Consejería de Cultura del Principado, va a proceder al cierre definitivo del tráfico por «Puente Viejo», como así se conoce el puente sobre el río Cares que une el pueblo de Robriguero con la carretera comarcal AS-114 Panes-Cangas de Onís. Una estructura catalogada por formar parte de una calzada romana de gran valor histórico y arquitectónico y que actualmente presenta evidentes signos de deterioro. No es la primera vez que el gobierno local aplica las exigencias del Principado para conservar el puente. Hace cuatro años ya se restringió el paso de vehículos sobre Puente Viejo porque se estaba deteriorando la calzada, había riesgo de hundimiento y los petriles del puente sufrían golpes. Entonces sólo se autorizó el paso de motos y quads limitando el acceso con pivotes. La exigencia, ahora, es que se prohíba definitivamente el paso de cualquier vehículo ante las evidencias de daños en la estructura.