Arenas (Cabrales),

Rebeca AJA

Mientras que Asturias, Cantabria y Castilla y León consensúan las condiciones del traspaso de competencias del parque nacional de los Picos de Europa, el Estado deja clara su postura con respecto a algunos de los escollos de la negociación como, por ejemplo, el reparto de personal. En este sentido, el Ejecutivo Central tiene claro que, a efectos de la actual gestión del parque, «no existe el déficit territorial que se pretende transmitir» en las negociaciones porque el servicio se está prestando «de un modo unitario» y la mayoría de los trabajadores del parque, «con independencia de su lugar de residencia, prestan sus servicios en el conjunto del espacio».

Los desequilibrios no lo son a efectos de gestión sino «a efectos numéricos» en cada comunidad autónoma, una situación que los Estatutos del Consorcio deberán tener en cuenta para «garantizar una situación análoga a la actual».

La Administración del Estado insta a los tres gobiernos autonómicos a hacer balance de los costes de personal funcionario y laboral que deben considerarse en el proceso de transferencias y a que traten de llegar a un acuerdo mediante las correspondientes compensaciones.

Por otro lado, el Ministerio de Medio Ambiente está estudiando los modelos de Estatutos del Consorcio remitidos recientemente por Asturias con la intención de tener en un plazo «muy breve» una respuesta sobre las garantías de unidad ambiental del parque tras el traspaso. Una gestión unitaria a la que ayer volvió a referirse el consejero de Medio Ambiente del Principado, Francisco González Buendía, durante su visita a Arenas de Cabrales para inaugurar las obras de la travesía urbana. El consejero exigió «hechos» a Castilla y León si de verdad esta comunidad está a favor de la unidad de gestión ambiental. Buendía defendió, nuevamente, el modelo unitario a través de un Consorcio fuerte y aseguró que no acudirá «a una convocatoria de otra comunidad si no hay nada de que hablar sobre unas condiciones mínimas».

A este respecto, Buendía tildó de «irresponsabilidad absoluta desde el punto de vista político» el traspaso «a trocitos» del parque. Aunque «legalmente y constitucionalmente» las transferencias se hacen a cada comunidad autónoma, Buendía subrayó la postura del Estado al respecto, recogida por LA NUEVA ESPAÑA, de hacer un traspaso único y simultáneo. Según Buendía, lo que hay en juego «no es cuestión de egoísmo por parte de Asturias», sino un parque nacido en la Montaña de Covadonga que tiene su asentamiento y sus funcionarios en Asturias. Buendía brindó la colaboración asturiana para que las otras dos regiones se doten de personal y reclamó una «buena transferencia» para «no desmembrar lo que está funcionando bien, sino fortalecerlo». Y agregó que Asturias abogó en su día por recabar la «cooperación» del Estado, algo que rechazaron Cantabria y Castilla y León.