El Mazucu (Llanes),
Emilio G. CEA
El tiempo dirá lo que quiera en los próximos días, pero en Llanes ya es primavera. Así lo marca cada 1 de marzo la fiesta en honor al Santo Ángel de la Guarda que se celebra en El Mazucu. Ayer, además, cabían pocas dudas a tenor del sol y de la buena temperatura que disfrutaron los lugareños durante su celebración.
La fiesta comenzó pasadas las doce y media con una procesión que partió desde el centro de la localidad y llegó hasta la capilla del Ángel. Tres hermosos ramos engalanados con panes y mimosas fueron portados a hombros por los jóvenes de El Mazucu vestidos con el traje de porruanu. Detrás de los ramos, alrededor de treinta aldeanas en rigurosa fila de a uno repicaban sus panderetas y cantaban las letras del ramu, al son que marcaba con el tambor Lorena Meré. Abría la procesión Adolfo Campillo, el gaiteru de Camarmeña (Cabrales). Una vez en la capilla, la procesión recogió la imagen del Ángel de la Guarda y continuó su peregrinar por la localidad haciendo el tradicional alto en el monumento a los emigrantes, donde se recordó a los ausentes.
Tras la eucaristía las aldeanas llevaron a cabo la reverencia y el canto del ramu ante la imagen del Ángel. El colofón a la mañana festiva lo puso la subasta de los panes de los ramos dirigida por Luis Obeso «El Páxaru».
