Mañana se celebra el Día Mundial Sin Tabaco. A pesar de que hay una mayor concienciación de los efectos perniciosos de fumar y el endurecimiento de la ley, en Asturias todavía mueren anualmente más de 2.300 personas por esta causa, que deriva en cáncer o enfermedades cardiovasculares y respiratorias. De estos fallecidos, 1.662 son hombres y 644 mujeres, según los datos de la consejería de Sanidad.
Son cifras demasiado elevadas. La última encuesta de salud de Asturias realizada entre 2012 y 2013 a la población de a partir de 15 años demuestra que la tasa de fumadores diarios es del 27,5% en hombres (la nacional es del 27,8%) y del 23,6% en las mujeres (en España es del 20,2% ). Por lo que en total, están enviciados al cigarro el 25,4% de los asturianos frente al 23,9% de los españoles. Otro dato negativo es que la edad media de inicio al tabaco es de entre 13 y 14 años y los que empiezan con el hábito diario rondan los 14. De ahí que el objetivo prioritario de los sanitarios sea llegar a los más jóvenes para que digan a tiempo no al tabaco pues es la droga más consumida por los españoles, lo hacen uno de cada 3. Aunque no es siempre es fácil porque son precisamente los jóvenes los que menos acuden al centro de salud.
Xuan de Con es enfermero en el consultorio de Villamayor (Piloña) y explica que ofrecen apoyo a quienes desean dar la espalda al cigarro. Lo primero que hacen es plantearle al fumador si desea dejar el hábito porque es clave que tenga voluntad de hacerlo para conseguir el éxito. Una vez que lo ha decidido hay que marcar la fecha en la que se va a decir adiós a la cajetilla. "Tiene que ser un día en el que más estable esté la persona", recomienda de Con, pues si es un período de estrés o tensión es fácil que el fumador recaiga. Cuando llega el momento señalado, recomienda comenzar con una estrategia que incluye ingerir abundantes líquidos, tomar fruta, hacer ejercicio físico y realizar actividades que distraigan para evitar la tentación de coger el cigarro de nuevo.
Hay fumadores que, además, necesitan un tratamiento sustitutivo de la nicotina para superar la ansiedad que les produce la falta del tabaco. Incluso se brinda ayuda médica y psicológica pues a veces se requiere recurrir a antidepresivos "para bloquear los receptores de la nicotina y mitigar la necesidad y ansiedad", explica el enfermero. La participación en grupos de fumadores también ayuda a reforzar la decisión tomada y compartir experiencias.
Los primeros días son los más difíciles y en los que cuesta más superar el "mono" o esa dependencia al tabaco. Por lo que conseguir pasar los dos o tres primeros meses sin caer de nuevo en el vicio es clave para lograr el éxito final. Xuan de Con agrega que "hay un porcentaje importante de abandono del tabaquismo en los últimos años". Lo atribuye al endurecimiento de la ley y las restricciones en los locales públicos, pero recomienda estar pendientes para que no se produzca un relajamiento y permisibilidad.
Dejar de fumar merece la pena, no sólo por uno mismo, que gana en salud, sino también por los de su alrededor, que empezarán a respirar un ambiente más saludable y menos molesto. ¿Qué ventajas tiene romper con esa dependencia del tabaco? La Consejería de Sanidad resume algunas como respirar mejor, menor cansancio, estar más ágil e incrementar el rendimiento si se practica algún deporte. No hay que olvidar que el cigarro atrofia algunos sentidos y cuando no se consume se empiezan a percibir mucho mejor los olores y sabores. Además, desaparecerá el mal aliento y el pestazo en la ropa y en los espacios en los que se fuma. La piel recupera elasticidad y se evita el envejecimiento prematuro que produce el humo. Pero no sólo eso, es que se previenen muchas enfermedades mortales, aumenta la satisfacción personal por el logro de haber vencido a la cajetilla y la cartera también lo agradece, el ahorro es importante. Son razones más que suficientes para dejar de fumar. Mañana, Día Mundial Sin Tabaco, que se conmemora con actos institucionales en Colunga, puede ser un buen momento para hacerlo.
