Diciembre no fue un buen mes de angula y las cifras lo demuestran. La rula de Ribadesella vendió el mes pasado 232 kilos de alevín, la mitad de los 466 que se subastaron en el mismo periodo de 2014. Son cifras ofrecidas ayer por el secretario de la Cofradía "Virgen de Guía" de Ribadesella, José Manuel Gutiérrez, quien indicó que la ganancia que dejaron estas capturas fue más o menos la misma que el año anterior. El precio medio del mes pasado estuvo ligeramente por encima de los 460 euros, "el doble que en 2014", indicó Gutiérrez. Después de una temporada con precios altos marcados por la escasez y las fechas navideñas, la angula cayó ayer hasta los 385 euros el kilo. El descenso es considerable si se tiene en cuenta que el día anterior se vendió a 455 euros el kilo.
Poco antes del mediodía de ayer en la rula llevaban pesados unos quince kilos y esta semana ha habido jornadas de veinticinco, síntoma de que la angula comienza a entrar en los cedazos. Con todo, todavía no se han vivido ventas como las que el año pasado duplicaron y triplicaron estas cantidades e incluso alcanzaron el centenar de kilos. "Hay alguna más, pero poca cosa", expuso ayer el angulero y trabajador de la rula José Ramón Pintado, más conocido como "Garuña", mientras realizaba el pesaje de las capturas que iban llegando. "Mucha gente trae de varios días", señaló en referencia a quienes llevan un kilo y pico o dos para venderlo, cantidades que por el momento no se corresponden con el trabajo de una sola noche. La costera de la angula comenzó en Ribadesella el pasado 3 de noviembre con cuatro meses por delante, que en realidad se traducen en 76 días. Es el Gobierno autonómico, que dicta las normas que regulan esta pesca y la duración , podrá alargar hasta marzo, siempre y cuando los anguleros renuncien a días hábiles a los que tienen derecho con anterioridad, entre noviembre y febrero.
El precio de la primera subasta de esta temporada reventó todas las previsiones, pues en Ribadesella alcanzó los 6.230 euros. El último lote de aquella primera venta bajó hasta los 655 euros, pero pocos días después la escasez de capturas lanzó el producto hasta los 700 euros el kilo en la rula riosellana.
