Miguel Gonzalo, peñamellerano de 82 años que durante su vida laboral fue transportista, falleció ayer en San Roque (Llanes), donde residía. Tras dejar su empresa de transportes a su hijo varón, al jubilarse, Miguel Gonzalo empezó a cultivar una de sus aficiones, la afinación de lloqueros (cencerros), lo que le llevó por numerosos eventos populares. El entierro es hoy, en Rozagás (Peñamellera Alta).