El portavoz del PP en Ribadesella, Juan Manuel Blanco, quiere pedir al concejal de Tráfico, Enrique Gancedo, de Foro Asturias, "que relaje un poco la presión sobre los conductores" en esta semana de Las Piraguas. Le ha acusado de estar "plagando la villa de prohibiciones y bandos prohibiendo la entrada y el estacionamiento" en el casco urbano, que recibe "cada vez más coches" con "menos sitio para aparcar".

Blanco criticó duramente la gestión que el equipo de gobierno está realizando del tráfico en esta semana festiva y le responsabilizó de que la Policía "esté abrasando a cualquier coche que pilla encima de cualquier raya". Cuestionó, además, "el cierre de los aparcamientos del casco urbano durante toda una semana" y aseguró que "nunca se hizo, no hay precedente, de usar un bando o una restricción para hacer caja. Lo que está pidiendo a los usuarios es un esfuerzo muy grande", añadió. El popular destacó, además, que la actual es "la mejor semana del año de los comercios, de los que pagan impuestos en Ribadesella" y a quienes, a su juicio, el equipo de gobierno "está chafando", pues las medidas adoptadas desvían a los que compran y dejan el dinero a las grandes superficies del extraradio, donde hay sitio para aparcar".

El partido de la oposición cree que Foro "debe retomar el plan y hacer algo que mire un poco por los intereses de los que mantienen el chiringuito durante todo el año, los comerciantes de Ribadesella". extrarradio declaró ser conocedor de que "a lo largo de la semana en el Ayuntamiento hubo que recular en varias medidas. Están gobernando a golpe de ocurrencia". Para el portavoz popular, "está muy bien la semana grande, pero para comerciantes y repartidores es un auténtico caos". Criticó que "las calles de la playa las sembraron de bandos", que a su juicio "tienen que servir para mejorar una situación, pero nunca para una recaudación". Blanco subrayó el caso de "un señor mayor que se puso dos minutos encima de la acera para descargar dos bolsas y le metieron ochenta euros de multa", relató, antes de apuntar que se trata de personas que "cotizan en Ribadesella, que pagan sus impuestos y que no pueden ir a la villa porque no pueden aparcar". También criticó los mercadillos que se realizan durante el verano, una "competencia totalmente desleal" hacia los comerciantes "en época que pueden recuperar algo para el invierno. Es jugar con el pan de la gente descaradamente y denota muy poco sentido común", concluyó. Mientras, los preparativos para Las Piraguas siguen adelante, tanto en Ribadesella como en Arriondas. En esta última villa se colocaron ayer las gradas para autoridades en el puente Emilio Llamedo.