Hace falta redactar un nuevo plan especial para el campo de golf municipal de la rasa de Berbes, que sustituya al de 1994. Lo recoge el Plan General de Ribadesella. ¿Las razones? De un lado, que las normas subsidiarias vigentes, de 1997, mantienen esta instalación sobre un suelo no urbanizable de especial protección. En el nuevo documento aparece como suelo no urbanizable, pero de interés productivo.

Así, el campo de golf, que ocupa una superficie de 678.712 metros cuadrados, con solo 159 metros ocupados y construidos, podrá resolver la existencia de dotaciones y servicios complementarios. Y los que lleguen en el futuro. También se podrán regenerar los espacios más degradados.

El nuevo planeamiento propone minimizar en lo posible los impactos ambientales y permitir en el campo de golf los usos hosteleros y hoteleros. Dado que el terreno es de titularidad municipal, todo indica que el Ayuntamiento podría licitar la concesión de las futuras instalaciones.