La protectora de animales "Huellas del Sella" pide precaución a los vecinos que decidan pasear con sus mascotas por la avenida de Castilla de Cangas de Onís, donde al menos un gato ha fallecido en la última semana, tras tragar veneno, y otros dos permanecen enfermos y con convulsiones por la ingesta de productos tóxicos. El colectivo animalista adelanta que pondrá una denuncia por estos hechos mientras busca hogar para uno de los mininos, que al parecer no tendría dueño y que se recupera favorablemente en una clínica veterinaria.