Á. FIDALGO

La piscina climatizada y el polideportivo de la Universidad de Oviedo se abrirán este mes. El anuncio, interrumpido por aplausos de los estudiantes, lo hizo ayer el rector, Vicente Gotor, durante la fiesta que se celebró en el Colegio Mayor San Gregorio para recuperar una vieja tradición universitaria de despedir el curso en compañía de antiguos alumnos.

Se trata de dos obras, que corrieron a cargo del Gobierno del Principado, que se fueron dilatando demasiado en el tiempo, pese a la insistente demanda de los estudiantes y especialmente del Rectorado.

Gotor, tras una reunión en Murcia con rectores y empresarios celebrada ayer, aceleró su viaje a Oviedo para no perderse la cita estudiantil, en la que naturalmente no faltó la tuna.

El rector, en una breve intervención en un ambiente totalmente informal durante el pincheo, les deseó suerte en los últimos exámenes, les alentó en el esfuerzo y les animó a «recuperar el espíritu guerrero de los antiguos universitarios». Como ejemplo puso a Marcial Fernández, todo un personaje en el San Gregorio y en el ambiente universitario, que es el entusiasta promotor de la asociación de antiguos alumnos del San Gregorio, por la que trabajó hasta hacerla realidad.

Después, Vicente Gotor tuvo unas palabras de elogio para la nueva directora de los colegios mayores universitarios, Ana Bernardo, que ayer disfrutó de su primer acto estudiantil, en el que ejerció de anfitriona. «Celebrar el fin de curso y juntar a antiguos alumnos con los noveles es el objetivo de esta espicha, en la que queremos también recuperar las viejas tradiciones universitarias», resumió Ana Bernardo, a la que el rector no escatimó elogios. «Tenéis a una directora guay», espetó a los animosos alumnos que llenaban la cafetería del colegio mayor.

«Para el próximo curso el rector cumplirá una de sus promesas electorales, la de rebajar el precio por el alojamiento en los centros universitarios, igual que hará con las restantes», precisó Ana Bernardo, que tiene por objetivo llegar a la total ocupación de la residencia universitaria, que ahora sólo está al sesenta por ciento.

Marcial, a secas, como es conocido en los ambientes universitarios incluidos los deportivos con su querido Uni al frente, resumió la reunión de ayer con dos palabras: «Nostalgia y tradición».

En la mesa presidencial, dos vicerrectores: Julio Antonio González, de Profesorado y Ordenación Académica, y Luis Rodríguez, de Estudiantes, junto con los antiguos alumnos que celebraban el encuentro. El rector charló animadamente con unos y con otros. Sobre las nueve de la noche la tuna comenzaba a cantar. La noche ya era de los jóvenes.