"No somos muy buenos, pero somos la peña con más armonía de Asturias". En la peña Lieres, de Siero, tienen claras sus limitaciones técnicas a la hora de jugar a los bolos en la modalidad de cuatreada, pero también son conscientes de que su pasión por el deporte autóctono no tiene límites. Hace unos tres años un grupo de aficionados retomó el testigo dejado por el desaparecido Celestino Speroni con el objetivo de mantener viva la llama bolística en la localidad sierense.

Tras unos comienzos marcados por la limitación de medios, al peña se consolidó este año y a pesar de que consiguió sumar tan sólo dos triunfos en la Liga Asturiana de Tercera Categoría cuenta ya con una amplia plantilla de ocho jugadores entre los que figura alguna que otra incorporación de campanillas.

Actualmente, forman parte del equipo gente como César Álvarez, Elías Barro, Jaime Palacio, Raúl Palacio, Rufino Presa, José Manuel Valdés o el presidente Segundo Lamuño, a los que hay que sumar dos incorporaciones llegadas a final de la presente temporada como son los jóvenes yerbatos Carlos Vázquez y Yoni Gutiérrez, que están llamados a dar un salto de calidad al equipo para la próxima campaña.

Sin duda unos dignos sucesores para aquellos jugadores que en su día acompañaron a Speroni en la recuperación de la bolera del Casino. En 1997, el que fuera gran jugador de peñas como Nava o El Arenal, reunió a gente del nivel de los hermanos Ramonín y Joseíto Crespo, Cuqui, José Ignacio o Aquilino para que Lieres volviera a disfrutar de los bolos más de una década después de la desaparición de la peña Solvay, ligada al emblemático pozo minero local.

Aquel equipo fue evolucionando y gracias a jóvenes talentos como Verónica Iglesias, Ramiro Paniceres y Fernando Villazón llegó incluso a militar en la máxima categoría de la cuatreada. Una meta que ahora parece lejana, pero que los jugadores y directivos quieren compensar con otras méritos. "Tenemos mucha afición y acudimos a todos los torneos que podemos", explica el jugador Jaime Palacio.

La contribución de la entidad a los bolos no se limita sólo a participar en los torneos oficiales, sino que la de Lieres es una de las peñas que en el último colaboró más estrechamente en la organización de campeonatos de la federación como fueron las tiradas del Campeonato de Asturias individual de Segunda o la final del Campeonato de Asturias por equipos, también de Segunda Categoría. A ello hay que añadir la organización del Memorial Speroni, que este año se celebró por formato individual coronando al naveto y excompañero de peña de Speroni, Javier Pruneda, en campeón tras la final que disputó contra David Fernández, de la llanisca peña La Venta Los Probes, coincidiendo con las fiestas locales de La Salud.

Esta cita sucedió a un homenaje póstumo al propio Celestino Speroni que se celebró un año atrás con la participación de varios de los mejores jugadores de bolos de todos los tiempos como fue el caso de José Luis Bilbao, Bernardo Menéndez, Javier Pruneda o el vigente campeón de Asturias, Sergio Hevia, así como muchos roscadores que compartieron colores o jugaron a sus órdenes como la pionera femenina, Verónica Iglesias.