Que nunca llueve a gusto de todos es un aforismo que seguramente podría situarse en el frontispicio de cualquier plan de empleo. Al menos, del que ayer puso en marcha el Ayuntamiento de Oviedo. La oferta de 85 puestos de trabajo agrupados en dos bloques implica el establecimiento de requisitos que satisfacen a unos y generan frustración en otros. "Encajo en los contratos en prácticas, pero parece que darán prioridad a los mayores de 45 años", explicaba Jorge Juan López, diplomado en Relaciones Laborales. "Estoy formada como auxiliar administrativo, en turismo y en informática; estoy ilusionada", subrayaba Lorena Álvarez. Un elemento común a casi todos ellos es la disposición "a coger lo que sea", con independencia de que se adapte más o menos a las preferencias de cada cual.
No hubo colas, pero sí un goteo constante de gente, en el Centro de Formación Ocupacional emplazado en La Corredoria en la primera jornada del plazo para formalizar candidaturas. Al finalizar la mañana, 71 aspirantes habían presentado la documentación exigida, y varias decenas más habían acudido a informarse. El plazo concluye este viernes, momento en el que el Ayuntamiento efectuará un balance global de la acogida del plan de empleo 2015-2016, que oferta 55 contratos en prácticas, y otros 30 por obra o servicio para mayores de 45 años. En ambos casos la duración máxima del vínculo laboral es de un año. La remuneración mensual oscila entre los 900 y los 2.200 euros.
"Para ser el primer día, 71 personas es una cifra apreciable. Lo habitual en estos casos es que, dado que se pide bastante documentación, la avalancha de solicitudes se registre en los últimos días", señalaron fuentes municipales como resumen provisional. José Antonio, 53 años, prefirió no dar su apellido, pero sí manifestó su decepción después de ser informado. "Llevo en paro tres años. Estuve 31 años trabajando en un laboratorio de prótesis dentales. Salgo un poco decepcionado. Tengo título de FP2 Electrónica, pero no sé si encaja. Yo busco lo que salga, estoy cobrando una RAI [renta activa de inserción] que se me acaba ahora. Temo que esta oferta sea algo más ficticia que otra cosa. Para gente parada y sin estudios no sirve".
Más optimista se mostraba Lorena Álvarez, de 26 años. Su única experiencia laboral ha sido otro plan de empleo, y confía en que le llegue una buena oportunidad. "Espero tener suerte. Estoy formada como auxiliar administrativo, en turismo y en informática. Estoy ilusionada, pero quizá haya mucha más gente que yo", indicó.
Javier Tárano, electricista, lleva dos años sin trabajo. "Ya se me acabó el paro, voy tirando de ahorros. Estoy dispuesto a coger lo que sea", proclamó. Beatriz, de 45 años, es de las que prefiere no especificar su apellido. Lleva en paro desde el pasado mes de septiembre. Salió del Centro de Formación Ocupacional visiblemente desanimada. "No cumplo los requisitos. Sientes impotencia", aseveró.
Jorge Juan López López es diplomado en Relaciones Laborales desde hace casi cuatro años y busca su primer empleo. "No tengo muchas expectativas. Encajo en la modalidad de prácticas, pero parece que darán prioridad a los mayores de 45 años. En Oviedo no suman puntos por estar aquí empadronado, y en otros ayuntamientos sí. Lo veo un poco complicado", indicó.
A sus 49 años, Covadonga Manso lleva en paro "más de cinco años". Trabajó como maestra interina de primaria en colegios públicos. Valora la oferta positivamente -"menos es nada, me parece bien"-, pero teme que "haya mucha gente que quedemos un poco excluidos, que no encajemos ni en una modalidad ni en otra". Con todo, va a intentarlo en el apartado de animación sociocultural. "Tengo experiencia, pero es difícil cumplir requisitos cuando tienes cierta edad, porque piden titulaciones más recientes", comentó.
Casi dos años lleva en paro José Alberto Fernández Fernández, de 55 años. Trabajó durante 37 años de auxiliar administrativo en una misma empresa. "Si hay algo de auxiliar administrativo, perfecto, pero también me valdría otra cosa. Estoy dispuesto a trabajar en lo que haga falta". Mientras la solicitud se resuelve, sigue peleando: "Estoy estudiando para hacer oposiciones".
