La Plataforma Pro Animales de Oviedo ha denunciado el envenenamiento de tres gatos callejeros en el entorno de Arzobispo Guisasola, en los jardines interiores de comunidades de vecinos. Para la agrupación, es probable que los animales murieran por efecto de raticida porque sufrieron fuertes hemorragias. "Es uno de los efectos principales que produce el matarratas, que no es otra cosa que un anticoagulante", explica la presidenta de la plataforma, Sandra Suárez.

El Seprona se ha hecho cargo de la investigación del envenenamiento, ocurrido a finales de febrero, y la plataforma ha colocado carteles por el barrio para alertar de los hechos y evitar que vuelva a pasar. Los felinos pertenecían a la "colonia de gatos Campillín", una de las treinta que la Plataforma Pro Animales controla en el municipio por medio del método CES (Captura, Esterilización y Suelta). Según Suárez, esta colonia ha disminuido notablemente en los últimos años y ahora cuenta con "con cinco o seis gatos".

La Plataforma Pro Animales de Oviedo recibe encargos de los servicios veterinarios municipales, el albergue de animales de La Bolgachina y la población. El Ayuntamiento aceptó implantar el método CES en 2010 tras una polémica sobre la forma que usaba entonces para impedir la proliferación de gatos callejeros: el sacrificio. El método CES permite controlar al 70 por ciento de los gatos de una colonia y evita la superpoblación felina en la ciudad.