"Los excautivos asturianos se reunieron en un lugar para ellos entrañable: en San Esteban de las Cruces. Pero el paisaje, aunque fuera el mismo que hace veintinueve años, les ofreció distintos perfiles, una fisonomía nueva y sosegada. La fisonomía de la paz. La reunión en esta ocasión, se convocó en torno al secretario nacional del Servicio de ex Cautivos, que vino en representación de su presidente, el marqués de la Valdavia. A continuación de la misa, y en la misma explanada se entregó la medalla colectiva a los miembros de la Hermandad".