Oviedo es un referente del Disc Golf en España. Dos de los cinco campos adaptados para la práctica de este deporte que hay en el país, de hecho, se encuentran en la capital del Principado, en los parques Purificación Tomás y de Invierno. Además, fue el ovetense y jugador profesional Carlos Río, quien reside en Noruega, el introductor del Disc Golf en España. Así, se dan todos los ingredientes necesarios para que la afición a encestar discos vaya a más en la región. Los miembros del Disc Golf Club Oviedo hacen también cantera y enseñan a escolares las reglas y técnicas necesarias para disfrutar de esta actividad al aire libre. Pero no sólo transmiten sus conocimientos a los estudiantes del municipio, reciben también visitas de centros educativos de Grado, Mieres o Avilés. "Cada curso trabajamos con más de mil estudiantes", dice Raúl López, de la directiva del club.
"Los que vienen de fuera aprovechan y se quedan a jugar todo el día", explica Flórez. Y entre todos los centros, destaca el Instituto de Trubia, donde Roberto Flórez imparte clases de Educación Física. Él mismo es jugador aficionado y ha desarrollado un proyecto con sus alumnos centrado en el Disc Golf. "Ideamos un sistema para crear canastas portátiles con materiales reciclados", destaca el profesor al tiempo que asegura que "en el instituto hay mucha afición". Además de las clases de iniciación que imparte a sus estudiantes, los chicos practican también los lanzamientos por su cuenta. "Tenemos discos a su disposición y se los dejamos los fines de semana para que puedan ir a Oviedo a jugar", señala Roberto Flórez. Los campos desplegados en el Purificación Tomás y el Parque de Invierno no son sólo pioneros. Proporcionan también el espacio necesario para que crezca la afición y se desarrolle la cantera.
