El dueño del taller mecánico en el que trabajó David F., el padrastro del pequeño asesinado y hallado en el interior de una maleta, ha asegurado esta mañana ante la jueza y el jurado, que el acusado le dijo "he preparado una muy gorda" la semana antes de que se marchase de Oviedo con su novia, cuando en ese momento presumiblemente el niño yacía muerto dentro de la maleta junto a las vías del tren del apeadero de La Argañosa.

David F., empezó a trabajar en el taller de Oviedo el 12 de septiembre de 2014 y al poco tiempo robó dinero y enseres del establecimiento, y mostró un comportamiento típico "de estar drogado, bebido y fuera de bolos", aunque su jefe decidió darle una segunda oportunidad e incluso le prestó euros en alguna ocasión " para pagar la renta o comprar comida".