El proyecto que maneja la Concejalía de Urbanismo para la puesta en marcha de un tren urbano que funcione como un metro en superficie, con servicios cada cinco o siete minutos en las estaciones y apeaderos del concejo, no convence en absoluto a la asociación de usuarios del ferrocarril "Asturias al tren", que considera inviable este plan. Según indica el portavoz del colectivo, Carlos García Alcalde, las actuales redes de ancho ibérico (Renfe) y ancho métrico (antigua Feve) "no tienen capacidad" para soportar las frecuencias propuestas, como no sea a costa de empeorar los actuales servicios de cercanías, algo que rechaza de plano. Además, García considera que todo lo que tenga que ver con la movilidad en el centro de Asturias no debe definirse en el ámbito municipal, sino dentro del proceso para la ordenación del área central de Asturias, proyecto que trata de resucitar ahora el gobierno del Principado utilizando como locomotoras a los ayuntamientos de Oviedo y Gijón.

Reducir servicios

A juicio de Carlos García, en lugar de incrementar el número de trenes, lo necesario es reducir los servicios en aquellos apeaderos que apenas cuentan con viajeros, citando, en el caso concreto de Oviedo, la parada de Vallobín. Según sus datos, apenas pasa de la decena de usuarios por jornada. Para "Asturias al tren", lo que tendría que hacer el gobierno municipal no es diseñar un sistema ferroviaria para la ciudad con las vías y el parque móvil del Adif y Renfe, sino propiciar la "mejora del autobús urbano, que sí es de su competencia",

En lo que coincide "Asturias al tren" con el concejal de Urbanismo, Ignacio Fernández del Páramo (Somos), es en la necesidad de mejorar el exterior y el interior de la estación del Norte, en la calle Uría. "Es una de las peores de Asturias desde el punto de vista de la accesibilidad", subraya García, que también aboga por hacer de la terminal un gran intercambiador del ferrocarril, el autobús y el taxi. "Hay que potenciar la coordinación de los distintos modos de transporte", sentencia.