El fútbol es equilibrio y el Oviedo todavía no lo ha conseguido esta temporada. El equipo azul está claramente descompensado. Es temible en ataque, pero concede demasiado en defensa. Ayer lo demostró en El Toralín y acabó perdiendo un partido que se le puso de cara por su gran nivel ofensivo. El equipo azul fue mejor que la Ponferradina durante los primeros 35 minutos, en los que además de adelantarse en el marcador generó suficientes ocasiones para obtener una mayor ventaja. Sin embargo, dos errores defensivos, uno en un fallo de marcaje y otro en una pérdida en la salida del balón, sirvieron para que la Ponferradina remontase el marcador.

En la segunda, entró mejor el equipo local, pero el Oviedo reaccionó y estuvo a punto de igualar el partido. Sin embargo, una nueva contra le condenó y, a pesar de que volvió a recortar distancias con otro penalti transformado por Susaeta, los locales sentenciaron ya en el tiempo de prolongación un choque en el que los azules pagaron muy caros sus errores.

La primera mitad, a excepción de los últimos diez minutos fue de claro dominio del Oviedo. Los azules tuvieron la posesión y las ocasiones ante un equipo local que rentabilizó sus dos únicas oportunidades para dar la vuelta a un marcador que se le había puesto cuesta arriba con el tanto de Susaeta, en el minuto 25.

El Oviedo entró con descaro en el partido. Los azules se hicieron con el balón y apenas tardaron tres minutos en generar la primera clara ocasión en un pase de Toché a Koné que le dejó solo ante el portero rival, pero su disparo se marchó fuera por poco. Fue el primer aviso de los oviedistas que dejó con muchas dudas a una Ponferradina que tenía muchos problemas para dar una salida clara al balón. Los locales cometían excesivos errores en los pases, lo que aprovechaba un Oviedo muy vértical para llegar con peligro a la meta de Santamaría. Toché, en el minuto 11, y Hervías, en jugada individual protagonizaron las dos siguientes ocasiones de un Oviedo que era dueño y señor del partido.

En el minuto 24, los oviedistas iban a obtener su recompensa en un penalti transformado por Susaeta, tras una acción en la que Pavón rechazó con el brazo el disparo de Koné.

El gol hizo justicia al buen juego del Oviedo, mientras que la Ponferradina seguía sin reaccionar y sin acercarse a los dominios de Esteban.

Sin embargo, todo cambió en el tramo final. En el minuto 34, los locales en su primer disparo entre los tres palos, aprovecharon un saque de esquina que cabeceó en el segundo palo Andy y Berrocal remató a la red para establecer el empate. Sólo seis minutos después, un error en la salida de balón de Cristian Rivera propició un centro desde la izquierda que David Fernández, en pugna con Yuri introdujo en su portería poniendo el 2-1 en el marcador. La Ponferradina salió mejor en la segunda mitad y apenas tardó dos minutos en generar la primera ocasión, en un disparo de Alvaro que rechazó bien Esteban. Los azules reaccionaron con una buena combinación entre Susaeta, Diegui y Hervías, pero el disparo del centrocampista se marchó fuera y poco después, los locales volvieron a disponer de una clara ocasión en un disparo de Alvaro Antón que se estrelló enel poste de la portería de Esteban.

El partido entró en una fase de ida y vuelta, en la que el Oviedo tomó riesgos en busca del empate, pero le faltó acertar con el último pase. Los locales aumentaron su ventaja en una buena jugada de Jebor que remató a la red Caiiado, y aunque Susaeta volvió a acortar distancias a siete minutos del final, un nuevo gol de Caiado sobre la bocina puso el definitivo 4-2.