A Carlos Peña se le acumulan las razones para esperar con ilusión a la cita de mañana. Visita el Tartiere el Valladolid, su exequipo, en un choque marcado por el pasado lustroso de dos equipos acostumbrados a navegar en la élite del fútbol nacional. Pero el choque significará además que el lateral regrese al equipo titular. La sanción de Bautista por su expulsión en Mallorca después de que se hubiera hecho con la titularidad abre la puerta al regreso a la misma de Peña. Y no está dispuesto, dice, a dejar pasar la oportunidad que se le presenta.
"Te engañaría si te digo que llevo bien la suplencia", reconoce ante la prensa después del entrenamiento de ayer, el penúltimo de la semana; "a todo futbolista le gusta ayudar en el campo. Pero hay una persona que es la que manda y cuando no juegas te toca prepararte físicamente y cuando llegue la oportunidad aprovecharla".
La oportunidad de la que habla llega ante un Valladolid en el que jugó las cinco últimas campañas, por eso el encuentro es algo más especial. "Allí viví muchas cosas, claro que es especial. Hablo constantemente con mis excompañeros y están fastidiados. El Valladolid partía en el grupo de favoritos, con la necesidad de ascender, con una gran plantilla y ahora quieren demostrarlo, aunque no les están saliendo bien las cosas", asegura Peña. "Debemos centrarnos en nuestro trabajo y aprovecharnos de sus nervios para quedarnos con los tres puntos. Así podremos empezar otra racha tan buena como la anterior", añade.
