Un golazo de falta directa de Aarón Ñíguez mediada la segunda parte dio el triunfo al Oviedo ante el Lugo en el Trofeo Emma Cuervo, en Ribadeo. Todo un detalle de talento del nuevo extremo azul, que superó la barrera con elegancia aprovechando una falta al borde del área, en el lado izquierdo. Nada pudo hacer el meta rival ante un disparo que entró a media altura y que bastó a los azules para imponerse en un encuentro equilibrado y sin demasiadas ocasiones por ninguna de las dos partes.

El gol de Ñíguez fue lo más espectacular de este tercer encuentro de pretemporada, otro duelo más para ir puliendo detalles de cara al inicio de la Liga. Los azules entrenaron por la mañana y durante el partido se notó la carga de trabajo. Hubo ocasiones en las que a los futbolistas les faltaba algo de frescura.

El encuentro también sirvió para ver por primera vez con la camiseta azul a Pucko. El esloveno jugó la segunda parte de extremo derecho, en lugar de Susaeta, y se le vieron algunos detalles, sobre todo de su velocidad. Al nuevo jugador azul se le vio implicado y con muchas ganas de aportar cosas.

Lo peor de la primera parte y de todo el partido fue la lesión de Varela. El lateral izquierdo tuvo que retirarse del campo en el minuto 35 después de saltar él solo y que a continuación se le fuera la rodilla, la izquierda, la misma de la que tuvo que ser operado la pasada temporada. El andaluz tuvo que ser sacado del campo por dos componentes del cuerpo médico del Oviedo, sin poder caminar y con grandes gestos de dolor.

El primer acto del encuentro fue por lo demás un tanto soso. Ninguno de los dos equipos estuvo demasiado acertado en ataque y sí bastante sólidos en defensa. El Oviedo lo intentaba por las bandas, con las incorporaciones de Saúl Berjón por la izquierda y de Susaeta por la derecha. El Lugo, por su parte, trataba de combinar para acercarse al área de Alfonso Herrero, pero lo hizo en contadas ocasiones y sin demasiado peligro.

La más clara de esta primera parte la tuvo Toché cuando se había jugado media hora. Una combinación entre Viti, que actuó de lateral, y Susaeta acabó con un balón al área que tocó el delantero murciano y que acabó dando suavemente en el palo. La otra ocasión de esta primera mitad fue también para Toché, en el 41, esta vez en una acción de Saúl Berjón por la izquierda tras pase de Edu Cortina. Al ariete le faltó muy poco para llegar y rematar a gol.

En la continuación Juan Antonio Anquela cambió a todos sus jugadores. Christian Fernández había entrado un poco antes que el resto por la lesión de Varela. El segundo acto comenzó con susto cuando Valentini casi se mete el balón en su portería.

Pasado ese susto inicial fue el Lugo el que lo intentó un poco más y Escriche probó suerte desde fuera del área. Lo intentaron los gallegos, pero sin llegar a meter en demasiados problemas a Juan Carlos. Un partido en general bastante espeso en el que al Oviedo se le notó la ausencia de mediocentros en la plantilla. En la segunda mitad el central del filial Josín tuvo que ocupar uno de los dos pivotes. El otro fue para otro jugador del Vetusta, Ander. Folch, por su parte, no jugó por precaución. Tampoco lo hizo por la misma razón Jorge Ortiz.

El único que fue capaz de deshacer esta igualdad fue Aarón Ñíguez. El extremo alicantino no solo marcó el tanto de la igualada del Oviedo, también lo intentó por su banda una y otra vez, siendo uno de los jugadores que mejores sensaciones dejó en el equipo de Anquela. El otro que en la primera parte rindió a buen nivel fue el canterano Viti, que parece que se está adaptando bien al lateral derecho. De todo habrá tomado buena nota un Anquela que se fue satisfecho.