El Oviedo tiene ya el esqueleto del equipo formado y por eso no tiene ninguna prisa por terminar de cerrar la plantilla. La defensa y el centro del campo cuentan con las piezas suficientes y además el equipo se está mostrando sólido en los partidos la pretemporada, por lo que en el entidad están tranquilos en ese aspecto.

Pero más arriba, en las zonas donde tienen algunas carencias, es donde más dificultades están encontrando para hacerse con los jugadores que quieren. En el club son conscientes de que pueden surgir oportunidades interesantes cuando quede poco para que se acabe el plazo de inscripción, en los últimos días de este mes de agosto. En ese momento el Oviedo podría encontrar o al delantero que está buscando o al mediapunta que sustituya a Fabbrini. Esas son las dos prioridades y donde quieren evitar equivocarse. El club podría conformarse con un mediapunta y olvidar la incorporación de otro delantero si consigue hacerse con un jugador que pueda formar por detrás del ariete y que permita que Anquela pueda jugar como más le gusta, es decir, con un solo punta.

Los extremos es una posición que, a pesar de la salida de Susaeta, están bien cubiertos. Anquela cuenta con Saúl Berjón, Pucko, Aarón Ñíguez y con el canterano Viti, que está dejando muy buenas sensaciones durante esta pretemporada y que podría incorporarse al primer equipo cuando Anquela lo requiera.