El catedrático de Química Orgánica, Vicente Gotor, presentó ayer su programa electoral al Rectorado de la Universidad de Oviedo. Un programa «realista, participativo e innovador» basado en los ejes de la empleabilidad de los estudiantes y en la internacionalización universitaria con la vista puesta en el horizonte del año 2010, el del Espacio Europeo de Educación Superior «donde nos vamos a jugar el prestigio social y académico que nunca debimos perder. A partir de ahora hay que ir deprisa pero con las ideas claras». Preguntado por las posibles nuevas carreras para la Universidad asturiana, Gotor prefirió no concretar: «antes de pensar en ellas hay que aclarar lo que tenemos» en relación precisamente con los nuevos grados que se avecinan. Minutos más tarde, ante un atento auditorio, Vicente Gotor lamentó que «algunas universidades en España iniciarán el nuevo curso con nuevos grados, y nosotros no».
Gotor defendió sus armas en el Aula Magna del Edificio Histórico, llena a rebosar, recordando «sus treinta años de docencia y sus 16 años de gestión», y aceptando la comparación con los demás candidatos: «Yo aporto una visión integradora de la Universidad de Oviedo, y los otros no. Ahora que tanto se habla de candidatos conservadores o progresistas pido que se mire la trayectoria profesional de cada cual y que se juzgue quien progresa y quien no».
«Nos une la Universidad» es el lema que sirvió de punto de partida. Una frase traducida al bable (Axúntanos la Universidá) y al inglés. Gotor pidió «que no haya desencuentros con el Principado» y que se logre un buen acuerdo presupuestario con la Administración. Al fin y al cabo, dijo, «la Universidad es la primera empresa de Asturias, con cerca de 30.000 personas. Tenemos que ser el motor fundamental de la región». Otra petición: «que las empresas confíen más en nosotros», frase con la que abrió la puerta de uno de los elementos programáticos centrales: el empleo de los titulados universitarios.
Gotor, al contrario que los candidatos Paz Andrés y Santos González, repartió abundantes críticas al actual equipo de gobierno. La más llamativa estuvo relacionada con la gestión de la investigación: «Ha sido uno de los mayores desastres de los últimos meses en la Universidad de Oviedo» e ironizó con uno de los dibujos que ilustran su programa, que muestra a un investigador comiéndose una de las ratas de su laboratorio. Abogó por recuperar la oficina de proyectos europeos, a la vez que lamentó que no haya en la Universidad asturiana un solo investigador coordinador de uno de ellos. El candidato se refirió a los «excelentes» equipos emergentes de investigación con que cuenta la institución y a que, a pesar de ello, «seguimos haciendo muy poca investigación aplicada».
Defendió la puesta en marcha de la carrera profesional. «Para el personal docente es lo que primero que hay que negociar» y lamentó que no se haya hecho ya por los desencuentros entre la Universidad y la Administración asturiana. Gotor se comprometió a impulsar un modelo de carrera administrativa para el personal no docente. «El modelo de gestión de recursos humanos que ha imperado en los últimos años dista mucho no sólo del ideal sino de la eficacia».
Docentes y no docentes se beneficiarán, prometió Gotor, de un plan de jubilación que mejora el actual, recién aprobado, con el 100% de las retribuciones.
En el programa se incluye una paga de fidelidad para el personal de administración y servicios con 25 años en la institución. «No es ningún brindis al sol».
