Oviedo, Efe / Europa Press

Los 190.000 kilos de aceite de girasol bajo sospecha de adulteración propiciaron ayer las críticas del PP, por lo que considera una «ocultación de información», mientras que la Consejería de Salud asegura que «no hubo ninguna situación de riesgo».

El Partido Popular acusó ayer al Gobierno regional de «actuar con frivolidad» en la gestión del aceite de girasol adulterado y anunció una interpelación urgente en el Junta General del Principado para «despejar dudas y transmitir a la sociedad si es cierto o no que se están tomando todas las medidas para que las partidas alteradas no lleguen al consumidor».

Así se manifestó ayer en rueda de prensa Ovidio Sánchez, presidente del PP de Asturias, en referencia a los 190.000 kilos de aceite de girasol sospechoso de haber sido adulterado que Asturias importó de Ucrania a lo largo del pasado mes de abril, según publicó ayer LA NUEVA ESPAÑA.

A juicio de Sánchez, las declaraciones del director de la Agencia de Sanidad Ambiental y Consumo, Juan Llaneza, relativas a que, sobre el papel, el aceite que se ha incorporado a la cadena alimentaria no implica peligro significativo alguno para el consumidor, «generan una tremenda inseguridad hacia el sistema de control que tiene el Principado». «Eso sí es crear alarma», apostilló el presidente de los populares.

Sostiene Ovidio Sánchez que la Agencia ya conocía la existencia de esta partida dañada «desde hace una semana, por lo menos». Según el líder de los populares asturianos, la Administración regional «intentó retirarla sin publicidad y sin informar a los ciudadanos». En esta línea, Sánchez acusó a la Agencia de «insensibilidad, ocultación de datos y falta de credibilidad».

El presidente regional del PP se preguntó «cuáles son las marcas, cuáles son los puntos de consumo, qué tipo de nocividad tiene el aceite para la salud» y «qué seguridad se puede tener como ciudadano». Asimismo, se cuestionó «qué productores de aceite de girasol pueden estar siendo perjudicados por la falta de información».

La réplica del Gobierno regional no se hizo esperar. La directora general de Salud Pública, Amelia González, afirmó que el Principado no informó a la ciudadanía hasta ayer de la importación de 190.000 kilos de aceite de girasol ucraniano porque «no hubo ninguna situación de riesgo, ya que prácticamente todo el producto fue localizado y retenido». La directora general admitió que una pequeña parte de esa partida sí pudo salir al mercado antes de las retenciones del producto practicadas, pero aseguró que no entraña ningún riesgo para la salud.

Según Amelia González, el Principado tuvo constancia el día 25 de abril, momento en el que el Ministerio de Sanidad y Consumo dio la voz de alarma, de la entrada de las 190 toneladas. «Desde esa misma jornada se comenzó a trabajar para inmovilizar el producto, y si la cifra no salió hasta ayer fue porque se había conseguido retenerlo». «Casi todo el aceite está localizado y no hubo ninguna situación de riesgo», reiteró la responsable de Salud Pública, quien subrayó que «si hubiese habido constancia de la necesidad de informar sobre cantidades, marcas o productos por cuestión de seguridad, se habría hecho, pero no fue necesario».

Con respecto al producto que sí ha salido al mercado, González reiteró que «no hay motivo de alarma», porque lo que se ha liberado «es aceite que interviene en otros productos elaborados en una cantidad mínima».