Gijón, E. G.
La restauradora María López Rey es licenciada en Bellas Artes por la Universidad de Valencia y se especializó en textil tras sus estancias en el Instituto del Patrimonio Histórico Andaluz y el Centro de Documentación y Museo Textil, de Tarrasa.
Su trabajo en la exposición del Museo del Pueblo de Asturias se va a complementar con una muestra fotográfica sobre la indumentaria femenina a lo largo del siglo en Asturias, que sale de los riquísimos fondos documentales del centro etnográfico. En total serán presentados al público cerca de un centenar de retratos femeninos o de grupo donde están representadas todas las clases sociales y todas las épocas.
Un primer recorrido rápido por la muestra genera al visitante una clarificadora visión de la moda, pero también de los modos, usos, costumbres y, en último extremo, del papel de la mujer en cada una de esas épocas. Y si la exposición de vestidos se centra en una clase media, moderadamente pudiente y mayoritariamente urbana, la muestra fotográfica bucea en la ropa de la mujer obrera y campesina. «Se trata de una ropa de la que, lamentablemente, nos ha llegado muy poco, porque las necesidades económicas obligaban a usarla hasta el último día», señala el director del Museo Etnográfico del Pueblo de Asturias, Juaco López. En su día alumnos de una escuela taller reprodujeron medio centenar de prendas de indumentaria campesina a partir de las fotografías existentes. La exposición tendrá un catálogo «on-line» para evitar gastos excesivos.
Su puesta en marcha el próximo viernes hará coincidir en Gijón dos exposiciones de moda femenina, distintas pero complementarias, y en ambos casos sorprendentes. En el Centro de Interpretación del Cine en Asturias (CICA), en el Casino de Asturias, abre hasta el próximo 6 de julio la muestra «Vísteme. De la alta costura al arte», un apasionante recorrido por 130 años de moda de primer nivel y coste, con representación de los grandes nombres de modistos del siglo XX. Glamour en ropa por la que parece no pasar el tiempo.
