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Rossen Milanov: " 'El sueño de Geronte' de Elgar es un trabajo musical excepcional"

"Es la primera vez que hago esta obra, más católica aún que el 'Réquiem' de Verdi, y también es novedad para la OSPA", señala el director de orquesta

Rossen Milanov, ayer por la tarde, en Oviedo. LUISMA MURIAS

"'El sueño de Geronte', de Elgar, es una obra musical excepcional sobre un texto muy religioso" explica el maestro Rossen Milanov, titular de la OSPA, que ayer interpretó esta obra en el Jovellanos de Gijón y hoy lo hará en el Auditorio de Oviedo a las ocho de la tarde, patrocinado por LA NUEVA ESPAÑA.

Estrenada en 1900, "El sueño de Geronte" fue objeto de disputa religiosa. Elgar, inglés, era anglicano pero el texto es marcadamente católico, corresponde a un poema del cardenal Newman, un gigante de la teología, clave en el movimiento de Oxford, quien anglicano de nacimiento se convirtió al catolicismo.

"Es una obra más católica aún que el 'Réquiem' de Verdi", indica Milanov, "hay declaraciones de fe y explicaciones muy claras. Elgar contaba ya con años de experiencia en componer música vocal. Las 'Variaciones enigma' tuvieron un éxito enorme. La tocaremos muy pronto en el Auditorio. Pero 'El sueño de Geronte' es aun mejor'".

Tiene una extensión de hora y media, con un descanso. La primera parte dura 35 minutos. "La introducción trata de los últimos minutos de la vida de Geronte y su muerte. El alma se separa del cuerpo. Todo con una gran mística y sencillez, no es dramática. La segunda parte presenta el viaje del alma al cielo y cómo se prepara para el encuentro con Dios. Es el momento del juicio final" indica Milanov.

Un ángel, papel que canta la mezzo británica Allison Cook, hace de guía. Dios solo aparece un momento "lo más corto posible y con un acorde lo más fuerte posible; es apenas una mirada que salva con dolor de amor" añade. Elgar utiliza más o menos la mitad del largo poema de Newman. La obra tiene muchas corales y el coro de la Fundación Princesa de Asturias canta diferentes personajes. Primero da voz a los amigos de Geronte en torno a su cama mientras muere. Después son ángeles, pecadores, demonios... a veces el coro canta a ocho voces. Y se desdobla. "Si hay espacio el segundo coro se puede poner lejos del escenario. "A ver si el bajo Nathan Berg, que canta el papel de sacerdote y después de ángel oscuro" comenta Milanov "se puede trasladar a un balcón del Auditorio".

Geronte es un personaje humano, no tiene tradición bíblica. Es una persona corriente "con sus pecados, pequeños o grandes".

"Me gusta la obra porque es muy tranquila y exige un sonido pianísimo, casi no material. La segunda parte arranca con unos sonidos que parece que estamos en el cielo", señala Rossen Milanov. "Es la primera vez que hago esta obra y también es novedad para la OSPA, es un viaje muy interesante. Es icónica en Gran Bretaña donde el público hace largos viajes para oírla".

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