Dice Guadi Galego que "O mundo está parado". Y esto que dice es parecido a lo que gritaba, de cuando en vez, Mafalda: "Que paren el mundo, que yo me bajo". Galego no es un dibujo en una viñeta, es una música de reconocido prestigio que comenzó su carrera en la escena tradicional, pero que hace tiempo que se ha hecho un hueco en el pop más independiente. "Lo que escribo y lo que le pasa a Mafalda no es nuevo: nos ocurre ahora, ocurrió en el siglo XV y sucederá en el XXV", promete la cantante que presenta su último disco mañana viernes (21.00 horas) en el club del Niemeyer, en los bajos del centro cultural de la ría. "Este concierto asturiano es una incursión y casi una inversión de futuro", explica Galego. Y es que la música es consciente de que la carrera que ha elegido -la música profesional- es "muy ingrata". "Antes de salir al escenario ya hemos gastado el 31 por ciento de la taquilla", señala con la mirada puesta en el pago de autores, Seguridad Social...

Y, pese a ello, la música gallega, con el premio "Martín Códax", no puede evitar seguir cantando. "Hace tiempo que vengo observando lo parado del mundo", reconoció. "Nadie toma conciencia, nadie hace nada y una sólo pregunta qué le pasa al mundo", apunta.

No es la primera vez que Galego viaja a Avilés. "Hace años que participé en un concierto con Tejedor. Fue en el Niemeyer. Éramos un montón. Fue muy especial para mí. Ahora viajamos cinco al pequeño escenario, pero siempre está bien regresar a Avilés. Cada vez que voy descubro algo nuevo", asegura. Galego cantará junto a Silvia Quesada y Alfredo González. "Son amigos y con ellos tenemos una vinculación personal y profesional muy subrayada", apuntó la música que canta en gallego y que lo hace con conciencia de que así puede reducir un tanto la recepción de su música. "Si cantara en castellano tampoco habría mucha diferencia", apuntó la cantante. "O mundo está parado". Se mueve mañana.