Gerardo Ruiz no es solo el preparador físico del Sporting. Es algo más. Es también uno de los motivadores del equipo. Y una de las tres patas del cuerpo técnico que capitanea Abelardo, y que también integra Iñaki Tejada, y que el Pitu considera fundamental para haber logrado el éxito del ascenso hace un año y el de la permanencia el domingo. Gerardo Ruiz, licenciado en INEF, da las claves de cómo el equipo de los guajes ha mostrado un amplio poderío físico durante la temporada, habla de los momentos duros, el subidón que supuso la permanencia el pasado domingo y cómo ve el Sporting del futuro. A su juicio, aunque se vayan algunos pilares como Luis Hernández o Jony, el conjunto rojiblanco mantendrá una de las claves que le han hecho ser diferente al resto, el trabajo y la intensidad.
-¿Ya le ha pasado el subidón de la permanencia?
-Todavía tengo una parte del cerebro con el subidón. Aunque sí que me lo creo, estoy flotando, y muy feliz, porque fue una descarga de la leche lograr el objetivo. Pero también, casi inconscientemente, quiero que siga un poco todavía esta sensación de felicidad para poder seguir disfrutándola.
-¿Qué comparación hace con el ascenso del año pasado?
-Sufrimos más este año. Subir es muy difícil, pero éramos unos gallos el año pasado, teníamos 82 puntos, solo perdimos dos partidos, y se disfrutaba más porque se ganaba y empataba. Ahora es más chungo todo, ganar un partido en Primera es terrible y nunca sabes cuándo vas a ganar el siguiente partido. Los nombres de los rivales acongojan, Valencia, Athletic, Atlético de Madrid, Villarreal? son todos unos peloteros y no hay tregua durante el año.
-¿Fue más duro el partido de Getafe o el del Villarreal?
-Para mí fue más el de Getafe. Si perdíamos estábamos descendidos. El empate nos permitía llegar con opciones a la última jornada, aunque no dependíamos de nosotros. Si nos hubiera ganado el Getafe descendíamos, pero es cierto, que aún con diez, tuvimos muchas opciones de ganar y estábamos mejor físicamente.
-¿Cómo ha visto todas las quejas que han llegado desde Getafe y Vallecas y las críticas a Marcelino García Toral?
-Lo que hay es que llegar bien colocado al final, porque si no dependes de ti van a ocurrir cosas de este estilo todos los años. Me parece desafortunado todo lo que se ha dicho. ¿Qué es que Esnáider, que jugó en el Madrid, no quería que ganasen? El sentimiento de Marcelino es de lo más normal, estuvo desde crío en la cantera, jugó en el primer equipo y después lo entrenó. Jugó limpio ante nosotros, y puso una alineación muy similar a la que jugó ante Getafe y Rayo. El Villarreal no se jugaba nada, y era normal que metiésemos más el pie nosotros porque éramos los que nos jugábamos la vida. Y además, ¿de qué se queja el Getafe? Dependía de él mismo, se hubiese salvado ganado al Betis, pero al final no lo hizo. Y el Rayo tuvo el fallo de perder en Anoeta. No tienen motivos para quejarse ninguno de los dos.
-¿La felicitación de Carlos Álvarez del Villar, su profesor cuando estudió INEF, fue una de las que más le emocionó?
-Sí, porque es mi maestro. En la década de los setenta, en España, la preparación física era la gran desconocida. En el fútbol y en el resto de deportes no existía preparación y por eso éramos los españoles un desastre a nivel mundial en todas las competiciones. Salvo casos puntuales no ganábamos en nada. En esa década Carlos Álvarez del Villar fue el padre de la preparación física para muchos profesionales como yo. Publicó un libro que se llamaba "La preparación física del fútbol basada en el atletismo", que para mí hoy por hoy, sigue siendo una biblia. Por eso me hizo mucha ilusión su llamada.
-¿Cuál fue el momento más duro de la temporada? ¿En qué momento vio que el equipo estaba en una situación delicada y podía irse a Segunda?
-Cuando perdimos en Villarreal y se lesionó Bernardo. Vi que se complicaba la cosa, y cuando también se cayó por lesión Sergio también vi que había un bache y me preocupé. También en Granada y Málaga, con arbitrajes sibilinos, lo vi mal y me di cuenta de que sí lo íbamos a tener fastidiado para salvarnos. Pero nos levantamos, salió Meré con un rendimiento espectacular, e hicimos una gran segunda vuelta de 27 puntos.
-¿Por qué en el mes de enero, en el ecuador de la temporada, suele pegar un bajón el equipo? ¿Es algo planificado ese valle en el aspecto físico?
-Es algo puntual o un partido que pueda salir mal. Tirando de datos, que los tengo todos bien anotados y recogidos, no recuerdo en mi etapa ningún mes de enero de bajón. Este año con el Villarreal, pese a perder, jugamos bien.
-Hubo muchos partidos que se le fueron al Sporting en las segundas partes, ¿lo tacha a la falta de experiencia o la exigencia física?
-Físicamente somos fuertes. Son cuestiones de juego, que puede entrar el miedo, te echas atrás y vienen equipos con más experiencia y te remontan. Eso es lo que nos pudo pasar en El Molinón con el Getafe o el Espanyol.
-¿Le ha pesado a los guajes el salto de categoría por la alta exigencia física y mental que supone?
-Un poco pesa, pero sinceramente lo que pesa más es que el mecanismo de recepción de lo que tienen que hacer, interpretación del juego y la ejecución tiene que ser un poco más rápida. En ese sentido tardas un poco más en adaptarte. Y sinceramente creo que los guajes han dado el do de pecho.
-¿Con qué momento del año se queda?
-Cuando ganamos aquí al Atlético y al Sevilla me di cuenta que no bajábamos. Vi que íbamos como aviones contra dos equipazos. Y empatar contra el Madrid y ganar al Valencia también fue muy grande.
-Luis Hernández y Jony ya han anunciando que no seguirán la próxima temporada.
-Son bajas notables y gente con la que llevamos ya trabajando unos años. Luis es un central con un gran bagaje en Primera y Segunda, con experiencia y muy serio, y que intentará mejorar sus prestaciones y currículum. Y Jony ha sido una pena que no se pudiera negociar la forma de que se quedase con nosotros. Su religión era el Abelardismo y tenía un "feeling" con todo el cuerpo técnico.
-¿Cómo será el Sporting de la próxima temporada? ¿Cambia algo la preparación al romper el bloque de los dos últimos años y que van nuevos jugadores?
-Se va gente pero se queda la columna vertebral como Meré, Nacho Cases, Sergio o Isma López, que van a transmitir a los que vengan que nuestra filosofía y seña de identidad pasa por el trabajo, sacrificio, sudar la camiseta, sufrimiento y la intensidad. No queremos gente que se pasee con el balón, queremos que se lo curren de verdad y después de sudar sin parar digan "míster, no puedo más".
-Abelardo decía que su sueño es ver al conjunto rojiblanco en Europa, ¿lo comparte?
-Soy consciente de que es un tema difícil, porque el Sporting llegó a Europa y por qué no se va a repetir otra vez. Es un sueño y el hombre tiene que soñar. Si se hace un buen trabajo en el club, en todos los estamentos, es posible. El primer paso ahora es consolidar al equipo en Primera. Y por qué después no va a llegar la opción de jugar la UEFA.
-¿A qué lugar de Europa le gustaría ir de concentración este próximo verano?
-Lo primordial es cambiar de aires, pasar la segunda semana de entrenamientos en un sitio en el que podamos jugar tres partidos contra rivales de buena calidad. Y después contar con medios, monte, playa y buenas instalaciones. Podríamos ir a Francia, Inglaterra, Holanda, Bélgica o Alemania.
