El presidente del Comité Español de Unicef, Carmelo Angulo, expresó ayer en el Senado su preocupación por la posibilidad de que los niños afectados por el terremoto puedan caer en manos de redes de tráfico de menores. "En un país en el que ya había altos índices de trata, nos preocupa que estos niños puedan caer en manos de explotadores en un momento de caos y debilidad de las instituciones", indicó. Por otro lado, Save the Children alertó de que podrían producirse casos de hipotermia entre los miles de niños y sus familias que desde el sábado están durmiendo en la calles. "Muchos hogares han quedado dañados o destruidos. Hay una necesidad urgente de atender a las madres, a los recién nacidos y a los niños, sobre todo en las comunidades más vulnerables", indicó el director adjunto de la ONG en Nepal, Roger Hodgson. Se calcula que un millón de niños se han visto afectados.