Un nuevo terremoto de 6,1 grados en la escala de Richter volvió a sacudir ayer el centro y el sur de México, desatando las alarmas apenas cuatro días después de otro poderoso seísmo, de 7,1. Al cierre de esta edición, las autoridades habían confirmado tres muertos más por este seísmo, que eleva a 406 el número de víctimas mortales en dos semanas.

El movimiento telúrico se registró a las 7.53 hora local y su epicentro se localizó 7 kilómetros al oeste de Unión Hidalgo, en el sureño Estado de Oaxaca, la misma zona donde el pasado 7 de septiembre un terremoto de 8,2, el más poderoso desde 1932, causara 98 fallecidos. Dos de las víctimas de este sábado, mujeres de 83 y 52 años, "perdieron la vida por infarto derivado de una crisis nerviosa", mientras que la tercera, un vecino del municipio de Asunción Ixtaltepec, "tuvo la mala fortuna de que se colapsó parte de su casa".

La alarma sonó casi un minuto antes de que se pudiera sentir el temblor en Ciudad de México, lo que permitió a muchos capitalinos abandonar sus hogares y repetir las escenas de hace sólo cuatro días, cuando otro seísmo se sintió con más fuerza, destruyó 38 edificios, en algunos de los cuales siguen las labores de rescate y causó 305 muertos. Esta vez el seísmo, cuyo epicentro se situó a una profundidad de 75 kilómetros, sorprendió a la mayoría de los capitalinos cuando dormían. Por protocolo se detuvieron las labores de rescate. Las tareas "se reiniciarán después de la revisión", a fin de determinar si hubo movimientos o colapso. La Presidencia, por su parte, llamó a mantener la calma en las zonas afectadas. El Servicio Sismológico Nacional (SSN) de México ha registrado 4.287 réplicas del terremoto del 7 de septiembre que sacudió el centro y sur del país y otras 39 réplicas del registrado el 19 de septiembre, de 7,1 magnitud Richter, con repercusión en Ciudad de México y los estados de Puebla, México, Morelos, Guerrero y Oaxaca. La comunidad científica estudia la conexión entre los terremotos del 7 y del 19 de septiembre, aunque por "la lejanía" de los epicentros, "de primera mano se está descartando una relación".