Llevamos el tiempo suficiente para conocer el talante, la palabra, las filias y las fobias de nuestros ediles.

Vecinos x Llanes rechazó los presupuestos municipales y pocos días después la misma asamblea los aprobó. Si alguien no conocía los principios del partido ya los conoce: es un partido marxista. Pero no se inspira en los principios de don Carlos Marx, sino en los principios del gran Groucho Marx: "Éstos son mis principios y si no le gustan tengo otros".

El concejal de la zona costera fue expulsado de Vecinos x Llanes por votar en contra de los presupuestos municipales. El exconcejal no entrega su acta porque se siente, el tránsfuga integral, respaldado por sus "seguidores". Otro marxista. "La parte contratante de la primera parte...".

Al concejal de Playas y no sé cuántas más concejalías le aconsejaría que unificara todas bajo el nombre de concejalía de Fuegos Artificiales. Una semana sí y otra también nos presenta un nuevo proyecto, y como la mayoría son "chiripitifláuticos" acaban explotando como pompas de jabón.

Y, por último, está la derecha bicéfala, que no se sabe si sube o si baja. A pesar de esta ceremonia perpetua de la confusión, el cuatripartito goza de excelente salud. Porque veinte años de gobierno de un mismo partido son muchos años y dejan una larga ristra de damnificados, y porque fuera del Ayuntamiento hace mucho frío.

Nos quedan por delante unos años muy animados. Vamos a ver a nuestros ediles comulgar con ruedas de molino, ejecutar saltos mortales, hacer piruetas y acrobacias que dejan a los acróbatas de El Circo del Sol en simples aprendices.

Visto el panorama, el Ayuntamiento debería crear una "escuela de risoterapia" e impartir cursos durante los fines de semana, preferentemente en invierno, a los visitantes para que disfruten de los beneficios de la risa, como ya disfrutamos los vecinos del concejo. Además, las anémicas arcas municipales lo agradecerían.