Cree ciegamente en su cantera. No son sólo palabras e intenciones ya que el TSK Roces ha dado un paso más al frente. su propuesta es firme y queda bien expuesta en su máximo exponente, el conjunto que milita en la Tercera División asturiana, donde pretenden mantener la categoría. Para ello, su máximo recurso serán sus canteranos, con una firme base de futbolistas criados en sus equipos inferiores. Es una de las señas a las que pretenden darle continuidad. Lo tienen claro. "Siempre tenemos en mente la misma idea, es nuestra filosofía, y es la de intentar que todos nuestro jugadores o, al menos la gran mayoría, puedan acabar jugando en el primer equipo", confirma el presidente de la entidad José Mariano Rodríguez Espinel.
Pero al margen de lo meramente deportivo, José Marino va un paso más allá y se centra en la persona por encima del futbolista ya que cree que "personalmente todos tienen que ir creciendo, hay más vida al margen de ponerse unas botas y jugar al fútbol, tienen que saber comportarse y no montar escándalos que están fuera de lugar". Por ello, el TSK Roces cuenta desde la pasada temporada con un coaching: Paco Prieto.
Los inexplicables acontecimientos que han salpicado en ocasiones las canchas de fútbol sala, con imágenes esperpénticas, tienen su repudia en el TSK Roces. El club gijonés trabaja por ello de manera incisiva fuera del campo, donde organiza charlas con los padres y los jugadores para que sepan comportarse en todo momento. "El coaching suele estar normalmente acompañando al equipo de Tercera División y al conjunto de División de Honor juvenil, realiza sesiones individuales con los jugadores, pero también citamos dos o tres veces durante la temporada a los padres y al resto de jugadores de nuestro club", explica José Mariano Rodríguez Espinel.
A su cargo se encuentran doce equipos de fútbol de campo con cerca de 220 futbolistas que defienden la elástica del club gijonés. Dos conjuntos juveniles, dos equipos cadetes, tres infantiles, cuatro alevines y el conjunto de Tercera División. En tres de estos equipos, el Roces cuenta con la Asociación de vecinos Covadonga-Roces, que lucen sus mismas equipaciones. su objetivo para la temporada es el de "intentar mantener todas las categorías y luchar con el juvenil B para que regrese a Liga Nacional".
Todo ello respaldado por una terna de entrenadores cualificados para que la formación sea la más adecuada. En este apartado se encuentran los siguientes técnicos: Florencio Pérez "Florín" (Tercera División), Miguel Ángel (juvenil A), Chispi (juvenil B), Chus (cadete A), Jhony (cadete B), Riestra (infantil A), David (infantil B), Vigil (alevín A), Jorge (Alevín B), Riki (infantil A. A. V.), Borja López (alevín A. V. V.) y Borja (alevín B A. V. V.). Todos ellos, junto a resto de cuerpos técnicos, así como delegados, forman un bloque compacto en el que su meta es la misma: la formación de la cantera.
Una de las grandes novedades de esta temporada es el cambio en la figura del coordinador deportiva con la entrada del exfutbolista profesional Monchu que, perteneció entre otros clubes, al Sevilla y al Sporting. Su llegada suma la experiencia adquirida en los terrenos de juego, mostrándose además con una buena predisposición para captar cuanto antes las señas de identidad que defiende con firmeza el TSK Roces para tratar en su cantera. "Mantenemos la misma línea de los últimos años, en los que pretendemos que todos los futbolistas de nuestro club sean, para nosotros, los mejores que existen. Hacemos durante todas las temporadas los mínimos cambios necesarios en nuestras plantillas porque queremos mantener siempre una unión especial", analiza el presidente de la entidad gijonesa.
