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Diputada regional del PP

La desfachatez de los socialistas con el carbón

La iniciativa parlamentaria para adelantar a 2020 el cierre de las centrales térmicas

Dice Pedro Sánchez que su partido, el PSOE, está comprometido con el carbón autóctono y las cuencas mineras. Y que no se cansará de repetirlo cada vez que visite Asturias. Pero al señor Sánchez le sobran las palabras y le faltan los hechos para demostrar ese compromiso del que tanto habla en Asturias y del que se olvida en cuanto pone un pie en Madrid, donde los socialistas votaron la semana pasada a favor de una iniciativa de Izquierda Unida y Podemos para adelantar a 2020 el cierre de las centrales térmicas.

Así que Pedro Sánchez puede decir misa, pero lo cierto es que la postura mantenida por su partido en el Congreso de los Diputados condena a muerte a la minería del carbón. Y como los diputados socialistas asturianos también votaron a favor de la iniciativa, cabe pensar que la FSA estaba plenamente informada de lo que se tramaba en el Congreso contra las comarcas mineras y contra Asturias, donde dejan cientos de puestos de trabajo, directos e indirectos, en el aire.

Pero, haciendo gala de una hipocresía fuera de lo normal, Pedro Sánchez se presenta en Asturias el pasado fin de semana asegurando que defiende a capa y espada el carbón autóctono y las comarcas mineras, mientras los socialistas asturianos aplaudían con devoción su discurso. Es el colmo de la desfachatez. ¿Y si el que hubiera votado a favor del cierre de las térmicas hubiese sido el Partido Popular? Pues la izquierda y los sindicatos ya nos estarían organizando una monumental.

Le recuerdo señor Sánchez, y también a sus acólitos asturianos, que, en democracia, las votaciones que se llevan a cabo en el Congreso de los Diputados son vinculantes. Déjese de manipular y mentir, que la verdad sólo conoce un camino. Y el del PSOE, en lo que a minería se refiere, es un camino escarpado.

Días atrás, leí con gran interés la exposición cuasi científica del señor Líndez sobre los umbrales de CO2 emitidos por kilovatio generado y sobre la incapacidad de las centrales térmicas para acometer de modo inmediato las reformas necesarias que les permitan cumplir esos umbrales, cosa que sí podrían hacer con el margen que da la Unión Europea, hasta el año 2050, para el proceso de transición energética.

Con semejante despliegue de conocimiento, hay ciertas cosas que se le han debido olvidar al portavoz de los socialistas en el Parlamento asturiano y que conviene recordar, por eso de poner los puntos sobre las íes. En primer lugar, que fue su partido, el PSOE, y más concretamente el exministro Miguel Sebastián, el que firmó el Plan de Cierre de la minería del carbón. También que fue fundamentalmente su partido el que dilapidó los fondos mineros que llegaron a Asturias para paliar la pérdida de empleos que traería consigo el cierre de la minería. Miles de millones previstos para la reindustrialización de las comarcas mineras que, en gran parte, fueron finalmente destinados a crear museos ahora cerrados, a polígonos industriales apenas utilizados o a promover empresas de idea y vuelta. Así gestionan los socialistas...

Si nos acercamos un poco en el tiempo, nos encontramos con que en el mes de junio, en el 39º Congreso Federal del PSOE, la delegación de Castilla y León propuso incorporar el apoyo al carbón nacional en el articulado de la Ponencia económica, por cierto, sin que la delegación asturiana nada dijese al respecto. Se votó y se optó por no incluir dicho apoyo. Ya estaba en marcha la descarbonización que muchos pretenden y defienden en el PSOE, incluida su presidenta Cristina Narbona, ante el silencio cómplice tanto de los socialistas asturianos como del SOMA, que según las crónicas asistía "cabizbajo" a estas decisiones.

El silencio, las protestas con la boca pequeña, el sí pero ahora no, esa postura de sumisión que mantiene la Federación Socialista Asturiana es bochornosa, de vergüenza. Más si se tiene en cuenta que Asturias presenta una de las tasas de actividad más bajas de España y que esta vuelta de tuerca al sector de la minería podría repercutir seriamente en la economía de la región, que todavía sigue sin ser capaz de acomodarse a los ritmos de crecimiento del resto del país.

Desde el Partido Popular, siempre hemos apostado, aquí y en Madrid, por incluir el carbón nacional en el mix energético (pueden leerse declaraciones al respecto del ministro Nadal afirmando que se sentía solo en esa defensa). Igual que en su día promovimos los fondos mineros para ofrecer alternativas a las comarcas mineras a medida que los pozos no rentables iban cerrando, fondos que, en muchos casos, se utilizaron para lucimiento socialista y no para generar empleo. Así que basta ya de engañar a las Cuencas. Porque tanta mentira no hace más que confirmar que el PSOE, en Asturias, se encuentra en fin de ciclo.

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