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Dando la lata

Los irreductibles

El plan del valle de Arán para independizarse de Cataluña

En la última sesión de la tertulia del contenedor hemos aprobado hermanarnos con nuestros homólogos del Valle de Arán, que seguro que los habrá. La decisión no ha sido unánime pues el vocal podemita se manifestó en contra y a favor. Porque es contrario y favorable a la independencia de Cataluña, aunque también aprueba y desaprueba la resistencia aranesa al "procés". Y como a la hora del sufragio levantó los dos brazos, no nos quedó otra que declarar nulo su voto, a lo que se opuso y no se opuso. Ada Colau hace estragos.

Bueno, pues es que el comportamiento de los araneses, al estilo de la irreductible aldea gala de Astérix y Obélix, nos tiene enamorados. Qué tíos. Qué plantados. Un verdadero grano en el culo del independentismo. Con un par. Y con un sentido práctico de la vida que no va en contra de sus raíces culturales, porque allí se habla y estudia aranés, castellano, catalán, francés, inglés y lo que haga falta. Sus tertulias del contenedor han de ser como la Torre de Babel.

A ver si para el puente de la Inmaculada nieva en condiciones, se van para allá los dos esquiadores del grupo y aprovechan para establecer contacto. Lo malo es que uno de ellos es el podemita, que ya nos avisó de que irá y no irá. Así que, a día de hoy, no sabemos cuántos representantes tendrá nuestra delegación. Lo más curioso de la sesión fue la votación de la moción en defensa del carbón autóctono. Como aquí todo el mundo está politizado hasta las cachas, del primero al último tenían instrucciones de partido. Votos a favor, todos. Votos en contra, todos también.

En conclusión, me fui para casa antes de liarme a pescozones. Que nuestro carbón está herido de muerte, con razón o sin ella, es un hecho. Que los partidos mantienen desde hace mucho tiempo dos discursos distintos, según hablen desde Madrid o desde Asturias, lo tenemos más que comprobado. Pero que ni aquí, en las cuencas mineras, seamos capaces de mantener la coherencia, es para hacérnoslo mirar.

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