La numerosa y sufrida tropa que es el funcionariado ha sido premiada por el gobierno que preside Mariano Rajoy con un incremento salarial del 1%. Creo que los mileuristas no caben en sí de gozo pues van a cobrar 10 euros más cada mes.
En el chiringuito donde almuerzan los funcionarios su medio menú y un tinto de verano, se frotan las manos al pensar que van a despachar el menú completo y vino de marca.
Los comentaristas políticos dicen que esta generosidad será tenida en cuenta a la hora de votar tanto a Rajoy como a Montoro.
Semejante racanería me temo que no sea de agradecer. Más bien de reprochar.
Ya ya que hoy estamos haciendo números, recordemos a los más de cinco millones de parados que malviven entre nosotros.