El sorteo de la noche del viernes del euromillones, que acumulaba un bote de cien millones de euros, no encontró acertante, por lo que el sorteo del martes ofrece un bote de ciento diez millones de euros. Respetables colegas se han dedicado a ofrecer ideas sobre lo que se puede hacer con un premio de cien millones, menos el veinte por ciento que se lleva Hacienda para entregarle parte a Mas para que pague embajadas de Cataluña por el ancho mundo. Con cien millones, que son ochenta, se pueden comprar islas paradisiacas, obras de arte de pintores míticos, salvo de algunos, y clubes de fútbol españoles, salvo Real Madrid o Barcelona. Con ciento diez millones, que se quedarán en ochenta y ocho, se podrán comprar las mismas islas, los mismos cuadros y los mismos clubes. Si el gran premio le tocara al Ayuntamiento de Gijón le daría para comprar la estación intermodal, sobre la que las partes contratantes no se ponen de acuerdo.
