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Dos calles anchas en Gijón

Pasado y presente de Corrida y San Bernardo, dos vías que surgieron en el plan de mejoras de Jovellanos

En el pasado de Gijón hubo dos calles "anchas". Anchas porque lo eran mucho más que las anexas. Eran más importantes, más transitadas, más anchas? Hablamos de la calle Corrida y de la calle San Bernardo, ambas producto del plan de mejoras de Gaspar Melchor de Jovellanos del año 1782. Esas dos calles se unen a través de la calle de San Antonio, una vía también muy importante en el plan jovellanista.

Por primera vez, a partir de ese año de 1782, la villa, siguiendo las ideas de Jovellanos, crece de una forma ordenada, racional, a través de calles que parten de Cimadevilla y que dan lugar a manzanas alargadas que conforman la "ciudad moderna". En el caso de la calle Corrida hasta la plaza del Carmen, y de la de San Bernardo hasta el Parchís. Luego esas calles se alargarían. En el caso de Corrida la calle acabaría uniendo el puerto local con la salida a Oviedo, y la de San Bernardo va desde la plaza Mayor hasta la salida a Villaviciosa. Pero, en principio, el primer tramo de Corrida se llamó calle Ancha de la Cruz, y el primero de San Bernardo fue la calle Ancha de San Bernardo.

Si hablamos de la calle Corrida digamos varias cosas. Lo primero que no se sabe por qué se llama así. Fue un nombre popular, en algunas actas municipales se habla de un mote para lo que oficialmente era la calle Güelga de la Cruz y luego calle Ancha de la Cruz. "Güelga" por ser esa zona, cuando Gijón era solamente Cimadevilla, un lugar relativamente alejado, un lugar para holgar, un sitio que convidaba al recreo.

Por el motivo que sea la denominación popular de Corrida se hizo ley y así quedó. Corrida por el hecho de ser muy transitada o Corrida por las obras que "corrieron" algunas casas para hacerla más ancha. Durante muchos años la prensa y documentos oficiales hablaban, incluso todavía a principios del siglo XX, de "calle Ancha de la Cruz, vulgo Corrida". Otro misterio, ¿a qué cruz se refiere el nombre? No lo sabemos. Quizás una cruz que estaba en plena calle santificando el lugar, protegiéndolo. Nada raro. Recordamos que en el actual Gijón existe la iglesia de Santa Cruz en Jove, en el oeste, (cerca del campo de fútbol de Santa Cruz) y otra cruz santa en Ceares, la famosa cruz de Ceares, justo frente a otro estadio de nombre La Cruz. Así está toda la ciudad, de oeste a este, bendecida. Protegida de males.

Otra calle ancha. La calle Ancha de San Bernardo (hablamos de su primer tramo), se llamó así hasta que su nombre se acortó simplemente en San Bernardo. Todo por la capilla de la Concepción, de los monjes bernardos, que estaba en la acera de los impares esquina con la calle de Domínguez Gil.

De todas maneras esa calle de San Bernardo tuvo un nombre anterior, calle de las Arrebalgadas. "Arrebalgadas" porque los gijoneses y gijonesas tenían que "rebalgar" o "arrebalgar" (andar a grandes pasos, a zancadas) por esa calle para pisar las piedras colocadas para sortear barro y agua. Desde la llegada de los monjes bernardos, en el año 1735, la calle de las Arrebalgadas cambió su nombre por Ancha de San Bernardo y luego por San Bernardo. Hasta ahora mismo. Salvo cuando se llamó calle de Joaquín Costa durante unos días del año 1915, luego el Ayuntamiento rectificó; y también se llamó, eso ya durante cuatro años, entre 1931 y 1937, calle de Blasco Ibáñez.

Para calle no ancha sino estrecha, la calle Espaciosa. Paralela a las dos "anchas" y situada justamente en la mitad de ambas, recibió popularmente el nombre de Espaciosa -que conserva- precisamente por no serlo. Por ser lo contrario: seguramente la calle más estrecha de Gijón, poco "espaciosa".

Bueno, la historia ya demostró muchas veces que los gijoneses llamamos a las calles como queremos. Cuatro ejemplos. La Cuesta de Begoña, la plaza del Parchís, la Acerona y El Muelle se imponen por goleada a sus nombres oficiales: Acisclo Fernández Vallín, plaza del Instituto, Armando Palacio Valdés y Claudio Alvargonzález.

El pueblo es quien más ordena, eso es lo que significa precisamente la palabra democracia.

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