Nada mejor que un rostro muy popular, a la vez que con gran tirón mediático, para tratar de relanzar la fiesta de las Piraguas de Asturias. Eso es lo que pensó el nuevo Comité Organizador del Descenso Internacional del Sella (CODIS), bajo la presidencia de Juan Manuel Feliz Granda, cuando asumió el reto de reverdecer viejos laureles e intentar revitalizar un evento deportivo que atravesaba una etapa con demasiados nubarrones en el horizonte, coincidente con el enorme vació dejado tras la muerte del llorado Emilio Llamedo Olivera, sin lugar a dudas uno de los grandes dirigentes de la comunidad autónoma y durante casi tres décadas máximo responsable del CODIS.
Si bien en estas últimas ediciones, a raíz de la aparición del colectivo parragués "Selleros", se abría una luz en lo concerniente a recuperar el espíritu de Dionisio de la Huerta -la otra alma del Sella, como bien señaló en su momento el riosellano Carlos Tejo-, faltaba el impulso definitivo. Y justo en este preciso momento, pese a las dificultades económicas con las que suelen toparse, el CODIS acaba de dar un golpe de efecto con la apuesta de una figura mediática para dar lectura al pregón de la 80.ª edición del Sella: la conocida periodista Lara Álvarez, una de las caras televisivas del momento, merced al programa "Supervivientes" de Tele 5.
Personalmente, me hubiese gustado que ese honor de leer los versos del fundador del Descenso desde el "balcón" del puente Emilio Llamedo Olivera, en Arriondas, el primer sábado de agosto, le hubiese sido asignado a la piragüista palentina Mara Santos García, campeona del mundo de maratón y medallista en Europeos y Copas del Mundo, quien logró su victoria en el Sella a la edad de 15 años y la última, en 2012 -con la gozoniega Maribel García, en K-2-, ya con 43 años. Atesora el récord femenino de la prueba sellera, tanto en K-1 (1 hora 27 minutos y 21 segundos, en el año 2007), como en K-2 (en 2009, con la gallega María Pérez Piñeiro).
También consideraría de toda justicia que otra mujer, vinculada al mundo de las piraguas y las palas, oriunda de Cangas de Onís, fuese la designada para pregonar el Descenso del Sella. Me refiero a Ana Rodríguez Fernández, quien en 1979, contando sólo 18 años, consiguió en los VIII Juegos Mediterráneos disputados en Split -antigua Yugoslavia- la primera medalla (bronce) en una competición de ámbito internacional y en distancia olímpica (K-1 500 metros) para el piragüismo femenino de éste país llamado España. Siempre militó en las filas del Club Piraguas Sirio, entidad en la que comenzó a dar sus primeras paladas en 1975 y donde permaneció hasta 1980, momento en el que recondujo su vida alejada de una disciplina deportiva en la que tuvo momentos francamente buenos y otros nada benévolos. Y también ganó el Descenso Internacional del Sella, en K-1.
Dicho esto, aplaudo la decisión de la actual junta directiva del CODIS por haber conseguido convencer a una figura televisiva, así como especializada en periodismo deportivo, para dar el pregón del Sella-2016. Atrás, en otras ediciones, quedan los intentos baldíos por traer a Arriondas al piloto de Fórmula-1 "Nano" Alonso, cuya agenda y compromisos varios le impidieron hasta la fecha acudir a la fiesta más internacional de cuantas tienen lugar en tierras del Principado de Asturias a lo largo del año: Les Piragües. O, por ejemplo, aquel otro conato más reciente de acercar al "balcón" de la capital parraguesa al archiconocido actor Arturo Fernández, pero que tampoco llegó a fraguar.
Insisto, aunque para gustos están los colores, me parece de 10 la firma apuesta acometida por Juan Manuel Feliz y sus grupo de colaboradores cara al Sella del próximo 6 de agosto. Ello se añade a la sabia decisión de tributarle homenaje en esta 80.ª Edición a la Sociedad Deportiva Santiagotarrak, de Irún, hermanando las aguas del Bidasoa con el "páter" Sella. Llegan, por fortuna, aires remozados a la Fiesta de las Piraguas de Asturias, pese a los continuos y tan cacareados problemas de índole económico, lejos de los tiempos de bonanza. Aires, por cierto, frescos y con visos renovados. De momento, Lara Álvarez ha sido el auténtico "as" guardado bajo la manga por los rectores del Sella.
