Arriondas, Ignacio FAES
La decimoquinta edición del festival de música electrónica Aquasella, organizada por La Real Producciones, bajó ayer el telón tras reunir en sus cabinas a «pinchadiscos» del calibre de Ben Sims o 2Manydjs, que compartieron platos con artistas locales como Reeko o Hugo Rolán. La música comenzó a sonar en la mañana del viernes. Aunque las puertas se abrieron a las ocho de la tarde, los miles de aficionados ya tomaron las inmediaciones del recinto para montar sus tiendas de campaña en cualquier espacio verde que encontraban.
A las márgenes de la carretera que une Arriondas con Ribadesella se sucedían improvisadas discotecas instaladas por los propios asistentes al festival. Desde un coche con las ventanillas bajadas hasta pequeñas carpas acondicionadas con potentes equipos de música. La gente se agolpaba en torno a los altavoces para, copa en mano, bailar al compás electrónico que ya no abandonarían hasta el final del festival. Las personas que hacían cola en los accesos corrieron, al abrirse las puertas, hacia el escenario principal al aire libre donde les esperaba ya el dúo de Djs Nuke & César Almena, que deleitaron a los asistentes con un set techno salpicado con algunas melodías más próximas al tech-house y al groove. Una forma suave de empezar el fin de semana.
El delirio llegaría en torno a las tres y media de la madrugada, momento en el que apareció en la cabina el inglés Ben Sims, uno de los Dj más importantes del mundo de la electrónica. Miles de personas botaban al son de sus temas más conocidos. La fiesta se prolongó hasta las doce de la mañana, hora en la que el asturiano David Mallada finalizaba su sesión.
Tras un «impasse» de ocho horas, en la tarde del sábado, Hugo Rolán comenzaba su set pasada por agua, augurando otra intensa noche discotequera. Su sesión estuvo monopolizada por un techno muy depurado, alejándose de las influencias ibicencas del tech-house o el groove, y centrado en sonidos provenientes de la electrónica de Detroit. A él le siguió otro asturiano, Héctor Llamazares, que luego dejó paso a otro de los platos fuertes, Groove Armada.
Aquasella cerró, en la mañana de ayer, con la actuación de Óscar Mulero, dj madrileño residente en Gijón que cuenta con numerosos fans en Asturias. Pinchó a la misma hora que el asturiano Richi Risco.
