Cudillero, Ignacio PULIDO

La expectación se palpaba en todos los rincones de Cudillero. Unos y otros hacían cábalas sobre cuál sería el contenido de L'Amuravela, que ayer recitó en pixueto Cesáreo Marqués ante los centenares de personas que abarrotaron la plaza de La Ribera. La corrupción, los problemas que acucian al sector pesquero, la dimisión del Papa Benedicto XVI o la actual crisis institucional que atraviesa el concejo fueron algunos de los temas del sermón laico que puso a San Pedro al corriente de la actualidad.

Cesáreo se subió, por primera vez desde 1985, a la lancha sin la compañía de su apuntador, Joaquín García «Juaco», fallecido el 1 de julio de 2012 en accidente de tráfico. El recitador dedicó a su difunto compañero el acto, mientras los presentes ofrecieron un aplauso que empequeñeció al anfiteatro pixueto.

Asimismo, la Cofradía de Jesús Nazareno y San Pedro Apóstol de Cudillero entregó a Luis Antonio García, segundo comandante de la Armada en Santander, el galardón «San Pedro 2013». El marino pixueto dedicó al pueblo el reconocimiento y también aprovechó la ocasión para recordar a su amigo «Juaco».

El buen tiempo contribuyó a que este año L'Amuravela gozase de una gran afluencia de público. Al mediodía, el párroco José Pérez Barcia ofició una misa solemne en «La Catedralina». Acto seguido, la imagen del patrón fue conducida entre el bullicio hasta la plaza de La Ribera, lugar al que llegó en torno a la una y media, casi treinta minutos más tarde de lo previsto.

Cesáreo Marqués enfiló la escalera de madera que conduce a la cubierta de la lancha de «San Pedro» y, antes de comenzar a recitar su sermón, cedió el protagonismo a Manuel Alfredo Fernández, presidente de la Cofradía de Jesús Nazareno y San Pedro Apóstol, quien elogió a Luis Antonio García. El comandante de la Armada fue agasajado con una placa y agradeció ante todos los asistentes el galardón.

Acto seguido, Cesáreo tomó la voz cantante. Presidiendo la plaza desde la proa de la lancha recordó a su compañero, «Juaco». «Pese a la ausencia, hoy estarás con nosotros más presente que nunca», señaló justo antes de comenzar a echar el sermón: «En el nombri de Jesús y a la Virgin Soberana vou ichar l'Amuravela comu San Pedro asperaba».

La primera estrofa del sermón fue dedicada íntegramente a la memoria de «Juaco». «Sei que desdí lu altu vei a dami las entradas pa nun tener nengún fallu asina que compañeru asperu tes priparau», recitó antes de solicitar un aplauso a todos los presentes y de señalar «yo vou facemi'l sordu con el pinganillu puastu».

Uno de los pasajes más esperados este año fue el dedicado a la convulsa política local. Cesáreo hizo alusión a los cuatro cambios de alcalde en el último año. «Cilibramus iliciones el... ¡ay, non! Toy intivocau, pos sin falta de facellas de alcaldis vamus cambeandu», comentó, y prosiguió enfatizando: «Pa que alguin tea de alcaldi tián el pueblu que votallu, ¡estu nun ya una cuchara que pasa de manu en manu!». Estas palabras desataron el aplauso del respetable.

Del mismo modo, Cesáreo habló sobre la presencia de Cudillero en los medios de comunicación debido a los conflictos que azotan el día a día cudillerense. «Tan todus en el fregau, de momentu las gavioutas paez que si tan llibrandu, miantras nun vayan a un plenu ya si prisentin glayandu», subrayó, e indicó que para resolver los problemas del concejo «un delegau de la ONU tinirían que unvianus».

La apertura del tramo Muros de Nalón-Las Dueñas de la Autovía del Cantábrico «con dos añus de ritrasu al menos», el argayo de Artedo, la ubicación del geriátrico o la falta de mobiliario en el polideportivo de Las Dueñas fueron otros de los temas locales tratados durante el sermón, que también hizo un guiño a la juventud local. «¡La juventú de Cuideiru paez si vei cumprumitiandu! Igual baxan en carrozas p'allegrar el refugayu que fan una plataforma ya si tan manifestandu», enfatizó.

Respecto al panorama de la región, Cesáreo hizo referencia a la variante del Pajares, al elevado precio de los billetes de avión o a la situación de la minería. «Nun visti'l trucu de magia que con el carbón fixarun, de la nuachi a la mañana sin saber cómo nin cuándu, quinantas mil toneladas de repenti s'isfumarun, asina un ha d'ixtrañati que tean las minas cierrandu, pos ya trabayar de baldri pa dispuás llevalu el viantu, lu pior son lus minerus que sí quedan sin trabayu», matizó.

La subida de los impuestos, la emigración juvenil o las jubilaciones fueron temas a través de los cuales el recitador analizó la coyuntura económica. La corrupción también tuvo su cuota de protagonismo.

Los sobresueldos del PP, la financiación de partidos y sindicatos, las cuentas de los Pujol en paraísos fiscales o la condena a la Pantoja también se reflejaron en los versos de L'Amuravela, que recordó al yerno del Rey. «De Urdangarín bien pensei qu'iba a metesi aldeanu, pos güi que pa ir a catar ya si taba preparandu, dixarun dispuas qu'era que i buscaran un trabayu pa siguir mamandu'l tetu», incidió.

«¡Nun fain más qu'arruinanus!», exclamó al referirse a los bajos precios y a los cupos. «Co la caballa pasounus igual que todus lus añus, ubligarun a parar cuandu más si taba dandu», lamentó, y añadió: «Una virguanza Patrón lu que nus vianin faciendu».

Marqués quiso brindar un hueco al buen humor y bromeó con la restauración de la imagen de San Pedro. «Vaya suarti que tuvisti l'añu que ti ristauramus, porque si llega garrati la muyar que ritocou al Ecce Homu de Borja, nin imaginallu quiaru aú ti puniría la barba», recalcó entre risas.

El sermón concluyó pidiendo protección al patrón, solicitando que nunca falte la pesca y que los turistas sigan visitando el pueblo. «Si co la Sara Montiel ti atoparas por el Cialu, dili que por munchus añus nus asperi ahí fumandu», solicitó.

Lo que queda

San Pedro da paso hoy a San Pablo en el programa de actos festivos de Cudillero. La Marina española participará en la procesión de San Pablo tras la misa. Y la música regresa a la calle con la orquesta «Diamante». Por la tarde los niños disfrutarán de teatro infantil con «Mamma Mía», «Los Pitufos» y «Los Lunnis». Y por la noche, verbena con «Solara» y «Diamante».

Mañana, San Pablín, será el «Día de los viayus y viayas de Cudillero y concejo». Y al mediodía será la misa y procesión floral por los muertos en la mar. Después, de nuevo sesión vermú con «Solara». Y por la tarde, las aguas de la Fuanti'l Cantu bautizarán a los foráneos que quieran ser pixuetos. Para celebrar el nacimiento de los nuevos vecinos de honor, bollu preñáu, botella de vino y la actuación teatral del grupo local «Los Rabanitos». Las fiestas terminarán con una verbena nocturna.