Miguel Cabanellas (Madrid, 1947), abogado jubilado y miembro del grupo "Son del Carmen", se define como "el tuerto en el mundo de los ciegos". Y ese mundo es su grupo, que rompe con el estigma de "los inicios siempre son duros" y basa sus comienzos en divertidas tardes entre copas y amigos allá por el 2006, donde las protagonistas eran las guitarras. Un amante de la música que, a pesar de haber nacido en la capital, reconoce tener su vida entera en Asturias y sentir gran ilusión por tocar hoy en la plaza Mayor, a las 12.30.

- Cuénteme sobre los comienzos.

-A mí y a mi hijo siempre nos ha gustado tocar la guitarra y cantar y tenemos un amigo que también era de este estilo, así que un día le dije: "Oye, ¿por qué no cogemos un local y vamos un día a la semana, hacemos una cena, copas; llevamos las guitarras y cantamos?". Y así comenzó todo; conseguimos hacer un grupo consistente, con un contrabajista y la primera vez que actuamos como grupo fue en una fiesta privada en el Savoy. No nos dedicamos íntegramente a esto, pero si ensayo también me apetece un día tocar con público. Aunque sin pasarnos porque es cansado. Intentamos que no pase de dos veces al mes porque, además, todos tenemos otra vida.

- ¿Cómo fue el salto de la intimidad a los escenarios?

-Bueno, llegó un momento en el que alguien se planteó ir más allá. Yo creo que gustamos tanto porque no somos tan malos y lo que tocamos gusta a todas las edades. Yo propuse tocar música latinoamericana porque no quería volver a tocar los "Rolling" o los "Beatles".

- ¿Cómo es su experiencia con la Semana Grande?

-Tocamos hace tres veranos por primera vez en el Paseo de Begoña. La experiencia fue muy buena. Empezamos a tocar y cuando nos dimos cuenta había gente en todo el paseo. La gente llegaba y no se iba, se quedaban. Para nosotros fue nuestro mayor éxito. La plaza Mayor es como una mayor categoría, así que por un lado, estamos muy contentos de poder tocar allí, pero por otro han encuadrado también a un grupo amigo nuestro "Los Desiempre", y siento que nos han quitado la mitad del tiempo. También me da un poco de pena la hora, porque las 12.30 horas es casi el desayuno. Pero no pasa nada, estamos encantados.

- ¿Tan buena le parece la plaza Mayor?

-Yo siento una alegría muy grande, es el mejor escenario de Gijón, quitando el Jovellanos, donde no se me ocurre tocar ni de broma porque nuestro grupo es más movido y la gente necesita espacio para bailar, no puede disfrutar desde una butaca. Es mejor tocar en un sitio donde la gente se relaciona, habla, se toma algo. Nosotros nos divertimos, pero la gente también. Y para eso la plaza Mayor es el sitio ideal.

- ¿Aprecian los asturianos la música hispanoamericana?

-Mucho. Aquí hay muchas raíces latinoamericanas. Siempre utilizo de referencia "Los Panchos" o el bolero cubano porque tengas la edad que tengas, te gusta. Siempre damos ese golpecito de ritmo con el son cubano o versionando a "Maná" que está muy guapo.

- ¿Tiene algún referente en la música?

-Lo que hacemos es lo que a mí me gusta. Yo ahora estoy estudiando jazz, también guitarra clásica? O sea que abarco tanto que todo lo hago mal. A mí me gusta todo lo que sea música.

- ¿Qué tiene Asturias de inspirador?

-Todo. Para mí Asturias es mi vida a pesar de que nací en Madrid.

- La música: ¿don o práctica?

-Todos conducimos coches pero no todos somos Fernando Alonso. Está claro que hay que estudiar algo de música; y eso que te mueve la inteligencia.