Convertir una caravana en una cámara de fotos gigante y móvil. Eso es lo que ha logrado hacer en el último año el fotógrafo valedor de dos Goya del sector Jonathan Hevia, que ayer dejó "asombrados" a quienes asistieron a la inauguración de su proyecto, bautizado como "La Mamut, en Ribadesella.
El invento, según explicó al numeroso público congregado junto a la rula, tiene un triple objetivo: rendir homenaje a los principios de la fotografía y a la primera cámara de grandes dimensiones, promocionar el concejo más allá de sus fronteras y, sobre todo, pasárselo bien. "La idea es llevarla a colegios e instituciones para explicarles a los neófitos en vivo cómo funciona una cámara oscura. Sin promocionarla siquiera ya nos han llamado interesándose por ella desde Galicia, Madrid o Alicante", explicó el fotógrafo, que en la presentación estuvo acompañado por su mentor, el cubano Jorge Alonso.
"Cuando llegó a mi academia en Oviedo con 16 años ya apuntaba maneras. Hay que tener en cuenta que se trata de la cuarta generación de fotógrafos de la familia, lo lleva en la sangre. Su bisabuelo ya era minutero", contó el profesor. La figura de Alonso ilustra la parte delantera de la caravana, a modo de homenaje, según contó Hevia.
En la parte trasera, donde va colocado el objetivo de la cámara, aparece el propio Hevia con su hija Carlota.En uno de los laterales se representa una cámara gigante de fuelle del año 1900, la primera "Mamut" , mientras que en el otro se refleja la historia de la fotografía desde que Aristóteles inventó la cámara oscura en el siglo IV antes de Cristo hasta hoy, entrelazadas con figuras e hitos célebres para Ribadesella como la de Dionisio de la Huerta, fundador de la Fiesta de Las Piraguas. Los diseños son todos obra del artista ovetense Bastián Prendes, que ayer tampoco quiso perderse la presentación. "Hevia buscó en internet a los mejores grafiteros de la zona, le salió mi nombre, se puso en contacto conmigo y desde el primer momento la colaboración fue fluida. Estoy muy orgulloso del resultado", confirmó.
En su interior, "La Mamut" tiene todos los ingredientes necesarios para cocinar una imagen. La caravana, traída desde Huesca, está completamente cerrada y la única fuente de luz es un pequeño orificio practicado en uno de sus muros por donde entran los rayos reflejando los objetos que capta en el exterior. El orificio funciona como una lente convergente y proyecta la imagen del exterior pero invertida y en cuestión de diez minutos, como por arte de magia, Hevia consigue convertirla en foto como antaño hicieron sus antepasados.
El presidente de la asociación profesional de fotografía de Asturias, Sergio Vega, fue uno de los invitados que ayer quiso comprobar de primera mano que el invento de "La Mamut" funciona y según su versión el resultado no pudo ser más satisfactorio. El evento estuvo amenizado por el grupo musical "Body & Soul". Los que no hayan podido asistir al mismo tendrán una nueva oportunidad de ver a "La Mamut" funcionando a pleno rendimiento este fin de semana en el festival de food trucks de Ribadesella, según confirmó Hevia, que acaba de recibir tres nominaciones a mejor fotógrafo de España y atesora varios reconocimientos, entre ellos tres Quijotes de la Asociación de Fotógrafos Profesionales de Castilla-La Mancha.
