Grupos del colectivo homosexual en Argentina practicaron ayer una "besada pública" frente a la Embajada rusa en Buenos Aires en repudio de la política contra los gais del gobierno de Vladimir Putin, quien llega hoy a Argentina. Con varias parejas besándose en público, los organizadores del acto se manifestaron así "en contra de las políticas que atentan contra la comunidad LGBT (lésbico, gay, bisexual, travesti, transgénero, transexual, intersexual y 'queer'), que se han implementado en Rusia durante los últimos meses, en especial mediante la ley contra la Propaganda Homosexual".

"Con la venida de Putin a nuestro país, hacer un acto público de besos frente a la Embajada rusa en Argentina es una de las mejores demostraciones para reivindicar nuestros derechos", dijo César Cigliutti, presidente de la Comunidad Homosexual Argentina (CHA).

Para Cigliutti, "una sociedad y un Estado que respeta la diversidad sexual, como Argentina, es un ejemplo que debería considerar Putin para sus políticas públicas".

Putin dijo públicamente el año pasado estar "harto" de las parejas homosexuales, al tiempo que aseguró que en su país no se discriminaba a las minorías sexuales. La Duma rusa (Legislativo) aprobó en 2013, casi por unanimidad, una ley que prohíbe hablar sobre homosexualidad.

Putin llegó ayer a La Habana en visita oficial, donde se reunirá con los hermanos Fidel y Raúl Castro, en la primera escala de una gira por varios países de América Latina. El presidente ruso ha condonado el 90 por ciento de la deuda cubana contraída en la época soviética.