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Divulgación

Una mirada al mundo de las aves para descubrir "pajareros"

Una amena fórmula de iniciación a la ornitología - basada en ideas clave, curiosidades, tests y juegos

Una mirada al mundo de las aves para descubrir "pajareros"

Cinco preguntas: ¿qué son?, ¿cómo se desplazan?, ¿qué comen?, ¿cómo nacen?, ¿dónde viven?. Cinco claves para componer un retrato robot de los pájaros basado en conceptos sencillos y en curiosidades, con mucho de juego y con un planteamiento muy visual. Esta es la propuesta de El libro de los pájaros, escrito por la periodista Nathalie Tordjman, especializada en temas de naturaleza y medio ambiente, y autora de varios libros infantiles, dos facetas (información rigurosa y narración accesible) que se fusionan en esta obra y que encuentran un complemento adecuado en las ilustraciones de Judith Gueyfier y Julien Norwood, de raíz naturalista (fieles al aspecto y las actitudes de las aves que retratan), pero con cierto toque naif para hacerlas más amables y atractivas a ojos de los niños, el público objetivo de este libro que, no obstante, gustará igualmente a lectores jóvenes y adultos.

Editado originalmente en francés, en 2017, llega ahora a las librerías españolas de la mano de Errata Naturae Editores, dentro de la colección "Los pequeños salvajes" que ha abierto un camino poco explorado en España en la literatura de divulgación naturalista. Cada una de las cinco grandes preguntas se subdivide para facilitar la transmisión de conceptos (así, "¿Qué es un pájaro?" atiende a la silueta, el pico, las patas, las plumas y el canto, es decir los rasgos que definen la identidad de un ave y la diferencian de otras similares), los cuales se completan y complementan con tests, juegos, historias, recomendaciones prácticas (sobre cómo observar aves o instalar un comedero o una caja-nido en el jardín) e, incluso, códigos QR para poder escuchar algunos cantos.

El formato de álbum, con gran profusión de ilustraciones y textos breves, a modo de píldoras, facilita la lectura transversal, la consulta rápida, la mirada curiosa, la asimilación del libro como un material de entretenimiento (que es la mejor vía de aprendizaje), una faceta que resalta particularmente en las secciones "Con lupa", donde se lleva a primer plano un "juego de las diferencias" (sobre patas, picos o plumas, por ejemplo), y "Curiosidades", el contenido narrativamente más jugoso, con más gancho (véase cómo los carboneros comunes -y los herrerillos comunes, que no se citan- aprendieron a abrir las botellas de leche en Inglaterra y transmitieron ese conocimiento, un caso repetidamente tratado en la literatura naturalista), aunque a veces se desaprovecha: la relación entre el arrendajo euroasiático y las bellotas olvida el importante papel del córvido como "jardinero forestal". Las escenas en las que se reúnen las especies características de un paisaje plantean preguntas que refuerzan conceptos y sirven para testar la atención del lector. También se le ofrecen herramientas, como los trucos nemotécnicos (muy subjetivos) que tanto gustan a los pajareros anglosajones para identificar y reconocer cantos.

El acierto de la idea y del planteamiento de El libro de los pájaros se ve empañado por algunos errores o interpretaciones poco acertadas: la rabadilla (u obispillo) no está donde indica la ilustración que describe la morfología de las aves (que apunta a las infracoberteras caudales); el treparriscos no asciende a las cimas para "pasar el verano al fresco", sino que aquellas son el hábitat donde encuentra las condiciones idóneas para alimentarse en esa época y anidar, y las abandona en invierno forzado por la nieve y el hielo; los petirrojos europeos españoles no se desplazan al Sur en invierno, sino que son residentes (solo se detecta una trashumancia de las montañas a los valles)... Hechas salvedades de este corte, y obviando alguna ilustración poco atinada (singularmente el cernícalo vulgar del apartado "¿Dónde viven los pájaros?"), se trata de un libro ameno, capaz de suscitar curiosidad e interés por las aves, y de conseguir, como plantea el texto promocional, que el lector se deje arrastrar por el "pajarero" que lleva dentro y abra la puerta al fascinante mundo de la ornitología.

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