Purificación Zapico Maroto no pudo acudir a Pola de Laviana, la ciudad que vio nacer a su padre y a la que estaba emocionalmente unida, cuando en el año 2010 se descubrió una placa en honor a las pioneras del balonmano en Asturias. No obstante, le hicieron llegar una medalla que guardó como oro en paño y mostraba a quienquiera que fuese a visitarla a su casa de Caracas. De los seis hermanos Zapico Maroto sólo sobrevive, ya nonagenario, José Manuel, que fue marino. Luisa Álvarez le recuerda enseñando a nadar a los chicos de Laviana en el Nalón, en el Pozu La Tella y el Pozu La Chalana, cuando eran unos adolescentes, terminada ya la Guerra Civil en Asturias.