Madrid / Oviedo, N. M. C. / P. T.

-Presidente, ¿habla usted bable?

-Probablemente hablo yo más bable que los que pretenden llevarlo a la expresión de la cooficialidad.

El jefe del Ejecutivo asturiano y candidato socialista a la reelección, Vicente Álvarez Areces, se pronunciaba ayer así al ser preguntado, durante un acto en Madrid, por el asturiano. Areces se mostró inflexible en la negativa a la cooficialidad que mantiene su partido. Pese a que el líder de quienes han sido sus socios de Gobierno en esta legislatura, el coordinador de IU, Jesús Iglesias, ha asegurado que no ve a la FSA renunciando a la cooficialidad si de ella depende un nuevo acuerdo de gobierno, el Presidente insistió en que el PSOE «no está por la labor».

La cooficialidad del bable y la construcción del embalse de Caleao marcan, hasta ahora, los enfrentamientos preelectorales entre las dos fuerzas coaligadas en el Gobierno regional. Aunque los socialistas no lo pregonan públicamente, los dos partidos consideran muy probable que tras los comicios acuerden un nuevo pacto para gobernar durante la próxima legislatura.

Areces afirmó que «muy pocos gobiernos han hecho una defensa del bable como el nuestro» y se definió como «la persona que dio paso al bable en las escuelas» en su etapa como director de Educación en el Principado. Y a las formaciones políticas que «hacen del bable su bandera», contrapuso que «otros hemos hecho más que los que llevan al asturiano a un ámbito que no compartimos».

Lamentó que IU se enroque en posturas «irrenunciables» como la oficialidad o el rechazo a Caleao. «Si todo es irrenunciable, ¿qué nos queda?», se preguntó.

Socialistas y coalición han polemizado públicamente en los últimos días sobre las cuestiones que se consideran básicas en el caso de que, tras los comicios, fuese necesario negociar un nuevo pacto de gobierno.

El coordinador de IU volvió a pronunciarse ayer sobre el asunto, aunque para replicar al secretario de la Federación Socialista Asturiana (FSA), Javier Fernández, que afirmó que es «preocupante» que la coalición considere «irrenunciables» cuestiones como la oficialidad.

«De acuerdos y negociaciones hablaremos tras el 27 de mayo, y mientras hay que tener tranquilidad, sosiego y voluntad de negociación», subrayó Iglesias, que reclamó prudencia a quienes dicen «tanto no», porque «a lo mejor tras las elecciones autonómicas tienen que decir "sí, pero..."».