Empieza un nuevo ciclo de «vacas gordas» para el sector lechero asturiano, pero los ganaderos no quieren cantar victoria. El precio de la leche en origen alcanzará, en cuestión de semanas, los 50 céntimos de media, diez más que en los meses pasados. Las opiniones de dirigentes agrarios y representantes políticos reflejan una mezcla de preocupación y optimismo.
Eduardo Alba, presidente de la Unión de Cooperativas Asturianas (Ucapa), asegura que la nueva situación de precios altos para la materia prima se prolongará al menos dos o tres años.
Para Alba otra de las razones que explican la escasez de leche es el control del cumplimiento de las cuotas lácteas: «No hay leche negra en el mercado (la que se produce sin sujeción a cuotas), y a ello se une la gran demanda de proteínas en Asia o la sequía en Australia y Nueva Zelanda».
En cambio, Alba tiene sus dudas sobre la repercusión del abandono de ganaderos en Asturias. «La producción apenas ha bajado, a pesar de que quedan menos productores que nunca».
El presidente de Asaja, Ramón Artime, se muestra cauto a la hora de valorar el nuevo escenario que se abre para el sector lácteo: «De momento, la subida beneficia al sector lechero asturiano, pero debemos tener en cuenta que también suben los costes de producción».
Artime también encuentra en la subida de precios una oportunidad para revalorizar la leche como alimento: «Ya es hora de que la leche deje de utilizarse como reclamo en las ofertas, es el alimento más completo que existe».
El dirigente de Asaja no oculta sus críticas a la política agraria europea: «La situación que vive la ganadería láctea en Europa es la consecuencia de la política de cuotas aplicada, la PAC ha fracasado». También lamentó que desde el Gobierno nacional se fomenten los abandonos indiscriminados: «Ahora resulta que hacen falta más vacas y ganaderos».
Luis Peláez, diputado regional del Partido Popular y portavoz en temas de Agricultura, opina que la política socialista ha sido nefasta para el sector lácteo. «El PP lleva años diciendo que la ganadería de leche tiene futuro, pero en Asturias se ha perdido la oportunidad para crear un sector competitivo».
Peláez lamenta la situación que viven muchos ganaderos asturianos «que quieren aumentar su producción y no tienen posibilidad porque el Gobierno nacional ha cerrado el mercado de cuotas lácteas». Peláez pide al Ejecutivo que explique por qué Asturias sigue liderando los abandonos ganaderos en el conjunto de España.
El secretario general de la Unión de Campesinos de Asturias (UCA), José Calvo, asegura que los ganaderos vendieron durante años la leche a precio de coste, e instó a los empresarios lácteos y a los políticos a «no rasgarse las vestiduras» por el actual cambio de situación».
Para Calvo, el incremento del precio se debe a la disminución del número de productores, dado que muchos se vieron obligados a abandonar por la reducción de las cuotas y las dificultades que presenta el sector.
Por su parte, Óscar Sirgo, secretario general de COAG, comenta que se abren buenas perspectivas para el sector lechero. Considera lógico que la subida de precios se traslade al consumidor; «lo que pasa es que la industria también debería subir el precio a los ganaderos a tenor de lo que va a subir al consumidor, que pagará un euro, o más, por el litro de leche, mientras que al ganadero le suben diez céntimos», indica.
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