Oviedo, Juan A. ARDURA

La política regional está hoy de celebración, aunque la efeméride pase desapercibida para las instituciones y los políticos de la región. Hace hoy 25 años Asturias vivía las primeras elecciones autonómicas de una democracia incipiente.

Aquellas elecciones -el mismo día se celebraron comicios en los ayuntamientos- supusieron una rotunda victoria para el PSOE asturiano, liderado por Pedro de Silva. Los socialistas tenían muy cerca las generales de octubre de 1982, las del «cambio», cuando Felipe González logró una abultada mayoría absoluta.

El PSOE asturiano, a lomos de aquel impulso, logró 26 de los 45 diputados de la Junta General. Pese a la rotunda victoria electoral, no todo era alegría: las crónicas políticas de entonces recogían el distanciamiento y la frialdad de trato entre el novel presidente Pedro de Silva y el dirigente sindical José Ángel Fernández Villa. «La fugaz mirada que se dirigieron los dos políticos más importantes del socialismo asturiano resulta un presagio del pulso interno que ya está puesto sobre la mesa», advertía una información en LA NUEVA ESPAÑA.

La segunda fuerza más votada fue Alianza Popular, liderada por Francisco Álvarez-Cascos y que concurrió a aquellos comicios coaligada con el PDP de Óscar Alzaga y con Unión Liberal. Los populares se quedaron con 14 diputados en la Junta General. La amplitud de la victoria del PSOE en las autonómicas y en los ayuntamientos, Oviedo incluido, unida a la victoria de Felipe González unos meses antes en las generales, llevó a Isidro Fernández Rozada, número dos de los aliancistas, a sentenciar en la noche electoral: «España es roja, ya no gualda».

La tercera formación con representación parlamentaria fue el PCA, encabezado por Francisco Javier Suárez, que obtuvo cinco diputados, cuatro en la circunscripción central y uno en la occidental.

El resto de partidos, hasta siete más, no consiguieron diputado alguno. El primer partido que se quedó a las puertas del Parlamento fue el CDS, cuyo secretario general era Sabino López, que luego centró su actividad en el mundo del fútbol. El Partido Socialista de los Trabajadores (PST) y la Candidatura Comunista (CC) lograron resultados mucho más discretos.

Aquel domingo, 8 de mayo, lució el sol y las playas asturianas rivalizaron con unas urnas a las que acudieron, a lo largo de toda la jornada, 552.334 votantes sobre un censo total de 875.880 votantes. Una jornada electoral que en Cabrales quedó relegada a un segundo plano porque el concejo aguardaba la llegada de «los murcianos» José Luis García Gallego y Miguel Ángel Díez, tras pasar 69 días en la cara oeste del Naranjo de Bulnes. Aquél fue otro hito en la historia reciente de Asturias.

El PSOE logró en las primeras elecciones autonómicas, en mayo de 1983, la victoria en las tres circunscripciones.

PSOE: 286.437 votos, 26 diputados.

AP: 164.891 votos, 14 diputados.

PCE: 58.454 votos, 5 diputados.

CDS: 21.133 votos.

PST: 4.608 votos.

CC: 4.069 votos.