Oviedo, R. L. MURIAS

El ingeniero llanisco ha enviado una propuesta al Ministerio de Medio Ambiente para que este organismo ponga en marcha la recuperación del lago de Comeya, en la zona de los lagos de Covadonga, dentro del parque nacional de los Picos de Europa. El área lacustre desapareció hace 8.350 años.

En el proyecto de recuperación de este lago, explica el ingeniero Mariano Zubizarreta Gavito, que se puede recuperar este humedal ya que, según este ingeniero, se conoce el lugar por el que se sumió el agua hasta dejarlo seco y también dónde nace el riachuelo desde el que se llevaría el agua para la recuperación del depósito acuífero. Zubizarreta Gavito apuesta por «taponar los sumideros de las Tresmonas». Asegura que así se lograría recuperar el lago Comeya, que «tendrá una superficie de once veces la del lago Enol y 66 metros de profundidad», explica. Estudios geológicos recientes revelan que este lago se formó en la última glaciación cuaternaria que tuvo lugar en la cordillera Cantábrica hace entre 28.000 y 30.000 años. Desde su formación la actividad del torrente del lago Enol, situado en las inmediaciones del lago Comeya, fue intensa y los sumideros naturales no tenían capacidad suficiente para evacuar el enorme caudal de agua de los frentes glaciares. Sin embargo, cuando el volumen de hielo fue disminuyendo, también cayó la actividad del torrente y entonces los sumideros naturales fueron liberando toda el agua acumulada en Comeya, que se secó de forma definitiva hace 8.350 años. Ahora, en Comeya, hay una enorme zona de pasto, pero Mariano Zubizarreta cree que el lago podría recuperarse.

El Ministerio ya ha trasladado la propuesta del ingeniero llanisco al Organismo Autónomo de Parques Nacionales, para que sea éste el que conteste a su propuesta.

Mariano Zubizarreta propone que el lago, además de recuperarse, podría servir para desarrollar actividades lúdicas y deportivas en la zona como, por ejemplo, el uso de canoas. Hace años el lago Ercina también sufrió perdidas de agua y los expertos fueron muy cautos ya que la fuga se pudo solucionar porque se trataba de un problema en el dique; pero apuntaron que si se tratase de un grieta natural la solución sería imposible.